El germen de Afaus pro Salud Mental se gestó hace casi 32 años en la Unidad Residencial de Alcohete para buscar una alternativa residencial y ofrecer un proyecto de vida a aquellos enfermos mentales, fundamentalmente esquizofrénicos, que se encontraban en condiciones favorables para hacerlo. «Imagínate que a ti te operan de una apendicitis en el Hospital y que por eso te dejan a ahí cuando tú lo que necesitas es que, puntualmente, te atiendan. Es muy duro pensar que tienes que vivir en un Hospital toda la vida cuando tienes capacidades para hacerlo fuera», explica Maribel Rodríguez, secretaria de Afaus. Ante esta disyuntiva, un grupo de familiares, pacientes y profesionales sanitarios decidieron crear una asociación para buscar salidas sociales y laborales para las personas que padecen trastorno mental.

Tras unos duros inicios y gracias a un ilusionante trabajo continuado y una apuesta firme por la profesionalización, hoy, Afaus gestiona un centro especial de empleo que ofrece formación específica a enfermos mentales y da trabajo a varios de ellos en servicios como la mensajería y la recogida de aceite usado en toda la provincia. 

Además, esta entidad socio sanitaria cuenta con un programa de vida autónoma basado tanto en el apoyo a domicilio como en viviendas compartidas y tuteladas con un menor o mayor supervisión según las necesidades de los usuarios. Además cuenta con un huerto ecológico y una vivienda en Cabanillas del Campo con 12 plazas de atención continuada, organiza multitud de talleres ocupacionales y gestiona la tienda El Rincón del Mundo, ubicada en la calle Felipe Solano Antelo de la capital  donde se venden artículos en depósito, objetos y ropa de segunda mano, muebles restaurados y otros trabajos realizados por los alumnos de los talleres. «Ahora mismo, tenemos un taller de textil en el que estamos aprovechando telas de ropa usada para hacer alfombras, cojines con piezas, prendas de vestir, etc. Y tenemos otro de tocados porque queremos cuidar la cabeza, pero también embellecerla» comenta Maribel Rodríguez. Precisamente, la secretaria de Afaus avanza que está prevista la organización de una cena de gala benéfica para el próximo 14 de febrero «y nuestra idea es regalar un tocado a las personas que vengan o otro detalle elaborado con telas de segunda mano a los hombres». 

Imágenes de distintas actividades laborales que promueve Afaus para las personas con enfermedad mental. - Foto: Javier Pozo

En cualquier caso, la portavoz de Afaus explica que la filosofía y actividad de esta organización ha ido evolucionando con el paso del tiempo. «Hemos cambiado con los años porque ahora centramos nuestros programas en las necesidades de las personas. No creamos un programa y buscamos personas sino que nos llegan las personas y, en función de sus necesidades, diseñamos los programas más adecuados», explica. En este contexto se enmarca el proyecto más ambicioso que, hasta el momento, ha impulsado Afaus para favorecer la inserción laboral y dar visibilidad a este colectivo. Se trata de la compra y reapertura, el 1 de abril de 2019, del Hotel Infante de la capital alcarreña, posteriormente rebautizado como El Sueño del Infante, y cuya inauguración oficial tuvo lugar esta semana, siendo el primer establecimiento hostelero de España  gestionado por personas con problemas de salud mental.

«Una red»

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Desde Afaus consideran que tanto su labor como, en general, el que prestan las asociaciones de ámbito socio sanitario es «como una red para recoger y que nadie se caiga por los agujeros que hay en lo público». «Nosotros prestamos ese tipo de apoyos que pueden necesitar las personas con enfermedad mental en cualquier momento de su vida. Desde un apoyo en domicilio, desde que tenga un lugar donde vivir hasta una formación y un empleo», incide Maribel Rodríguez. Para conseguirlo también cuentan con la colaboración tanto de la propia administración pública, especialmente de la Junta, como de otras entidades tales como la ONCE. 
Pero, por encima de todo, Afaus pro Salud Mental lucha cada día por romper esas «barreras invisibles», esos prejuicios forjados desde la ignorancia y ese estigma que todavía está asociado a la enfermedad mental. Ella es, sin duda, la gran desconocida y olvidada de todas las discapacidades.