«Estamos enfadados y muy preocupados». Con estas palabras resume Alberto Domínguez, presidente de la Asociación Provincial de Estaciones de Servicio integrada en CEOE-Cepyme Guadalajara, el sentir general que reina entre los empresarios del sector ante el sistema de descuentos de los carburantes aprobado por el Gobierno central (20 céntimos de euro por litro) que comenzó a funcionar el pasado viernes en todo el país. Aunque no se han producido grandes aglomeraciones ni falta de abastecimiento en las gasolineras de la provincia, Alberto Domínguez confirma que la afluencia de clientes fue mayor, especialmente el primer día, y que los propietarios de los surtidores han tenido que adelantar «importantes cantidades de dinero» que, en la mayoría de los casos, la administración central no ha reembolsado todavía. De hecho, se calcula que solamente el 20 por ciento de las estaciones de servicio españolas (unas 2.800 de las 10.000 existentes) han recibido esta compensación.
Esta situación genera una «enorme indefensión» en los empresarios del sector, ya que la mayoría son «pequeños autónomos que no cuentan con la sufiente liquidez para hacer frente a estos anticipos», recuerda Domínguez. De hecho, las 27 empresas pertenecientes a la Asociación Provincial de Estaciones de Servicio de Guadalajara son pymes mientras que las 59 restantes pertenecen a las grandes petroleras (Repsol, BP, Cepsa y Galp) o son gasolineras 'low cost' surgidas en los últimos años. «Seguiremos aguantando hasta que podamos, pero hay gente que no tenía capacidad económica para adelantar el dinero y ha decido cerrar», lamenta este empresario de Jadraque.
Ante las dificultades y el malestar que este mecanismo de descuentos ha producido entre los empresarios del sector, el presidente provincial anuncia que no se descarta la convocatoria de algún tipo de movilización de aquí a la Semana Santa, el período del año en el que más desplazamientos por carretera se registran tanto a nivel provincial como nacional. «Es uno de los mejores momentos del año para nosotros pero, con este jaleo en el que nos han metido, a más clientes te encuentras con que tienes más pérdidas», afirma. Por ello, Domínguez considera que la solución «más sencilla, rápida y efectiva» para abaratar el precio de los carburantes hubiese sido aplicar una rebaja del 10 por ciento del IVA, «y ahora no tendríamos todos estos problemas».
Por otro lado, desde la patronal provincial critican que la rebaja de 20 céntimos no se haya aplicado también al gasóleo de la calefacción y que el interlocutor establecido por el Ejecutivo central para la negociación «sea de tercer nivel» y sólo se haya tenido en cuenta a las grandes petroleras. De la misma manera, reprochan la «inseguridad jurídica» que a los empresarios del sector les genera el Real Decreto aprobado por el Gobierno para regular esta cuestión, ya que ante cualquier defecto de forma en la gestión de las solicitudes «pueden ser rechazadas sin posiblidad de reclamación». Por ello, desde la Confederación nacional se tiene previsto presentar un recurso, según lo acordado en la asamblea celebrada este mismo miércoles.