La llegada de 'Prado Extendido' levanta grandes expectativas

Inmaculada López Martínez
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La presencia de fondos de la pinacoteca más importante del mundo en el Palacio del Infantado así como la rehabilitación del edificio y la modernización de su museo se recibe con expectación e ilusión

Vista de la fachada principal del Palacio de Infantado, edificio que se someterá a una completa remodelación interior en los próximos años. - Foto: Javier Pozo

«Un antes y un después». Así es como muchos definen lo que supondrá la llegada del programa Prado Extendido a la ciudad de Guadalajara tanto a nivel patrimonial y cultural como en el ámbito turístico y social. La reciente visita del ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta, a la capital alcarreña para dar a conocer los rasgos generales de este proyecto supuso la confirmación de que lo que hasta ese momento solamente había sido un anuncio reiterado en el tiempo.

Según detalló el ministro, la ambiciosa actuación prevista para el Palacio del Infantado en los próximos años abarca no sólo la exhibición de una colección de obras propiedad del Museo del Prado sino la adecuación integral del edificio y la modernización y ampliación del espacio dedicado al Museo de Guadalajara. Para ello se ha presupuestado una partida de 12,5 millones de euros, de los cuales nueve serán aportados por el propio Estado y tres de ellos en el presente ejercicio 2023. Se trata, sin duda, de «una gran noticia para Guadalajara, para nuestro museo y, por supuesto, para el museo del patrimonio de nuestra región», valora el director del Museo de Guadalajara, Fernando Aguado. «El Museo del Prado tiene una ventaja frente a otras instituciones museísticas que es el valor de marca que añade a la calidad indiscutible de sus colecciones. Participar en el Prado Extendido puede ser un polo de atracción importante para que muchos visitantes puedan conocer el Museo de Guadalajara, sus colecciones y su sede, el extraordinario Palacio del Infantado», añade este profesional.

Colección

Aunque todavía son muchos los detalles que quedan por cerrar y por conocer sobre esta iniciativa, fuentes del Museo del Prado consultadas por esta redacción aseguran que ya se está trabajando en ello y que «en los próximos meses» podrá conocerse qué tipo de obras de arte procedentes de la pinacoteca más importante del mundo serán las que, finalmente, albergue el Palacio del Infantado. Sobre esta cuestión, Fernando Aguado confirma que ya se ha producido una reunión inicial entre los técnicos del Museo del Prado y los del Museo de Guadalajara «para ver cómo podemos desarrollar el proyecto y, partir de ahí, redactar un guión expositivo para analizar qué posibles obras podemos contar». En este sentido, Aguado detalla que «lo que nos han pedido es una Sala Prado». «Será un espacio expositivo paralelo al Museo de Guadalajara que intentaremos integrar dentro del edificio para que tenga sentido, para que no sea algo distinto a lo que la gente esta viendo en el resto del museo», señala. Por su parte, el delegado provincial de la Junta (gestora del inmueble), Eusebio Robles, confirma que la colección que recale de manera permanente a Guadalajara será «interesante y atractiva», tal y como adelantó Miguel Iceta, pero que la decisión final será estudiada y tomada «en base a criterios técnicos»; si bien es cierto que por parte de la administración regional ya se han expresado algunas preferencias. Además, Robles señala que la adaptación del Infantado a los usos y corrientes museísticas actuales no sólo va a permitir la llegada de esta colección permanente con sello Prado sino que abrirá las puertas a recibir «otras exposiciones temporales importantes» que, hasta el momento y por las condiciones actuales del inmueble, no ha sido posible exhibir por motivos técnicos. 

Es por ello que todos los agentes implicados en este proyecto coinciden en señalar que la actuación prevista en el Infantado no es sólo  «trascendental» por convertirlo en sede del programa Prado Extendido sino por la reforma integral que se acometerá en el edificio, incluida la completa transformación y ampliación del Museo de Guadalajara. «En la actualidad, los museos están concebidos como centros de conservación, de investigación, de aprendizaje, de documentación, de difusión, restauramos obras, exhibimos a través de exposiciones permanentes y temporales colecciones patrimoniales. Es decir, somos grandes centros culturales y la sede del Museo de Guadalajara presenta  múltiples deficiencias para cumplir con esta función museística que esta actuación permitirá solventar», indica Fernando Aguado. Así también lo valora Eusebio Robles, quien señala que las obras que se acometerán en la joya patrimonial por antonomasia de Guadalajara posibilitarán «adaptar y optimizar muchos de los espacios que ahora están en desuso a una función museográfico y actualizar el Museo de Guadalajara a las nuevas necesidades y tendencias». 

Al hilo de esta cuestión, el alcalde capitalino, Alberto Rojo, confirma que gracias a esta actuación «se van a crear nuevos espacios, se va a dar utilidad a las galerías, al aljibe de los jardines... Va a ser un lugar maravilloso al que podrán llegar también opciones de restauración». «Hay quien minimiza estas cuestiones; hay quien piensa que al Infantado vendrán 'dos o tres cuadritos del Prado de esos que tienen en muchos otros depósitos' y no es así. Estamos ante un verdadero proyecto de museo que es espectacular», asegura.

En cuanto a los plazos, el delegado provincial se muestra optimista ya que, tal y como recuerda, «no partimos de cero sino de un trabajo previo» «Ya existía un Plan Museográfico redactado que agiliza el proyecto, se lleva trabajo avanzando y estoy convencido que más pronto que tarde vamos a ver cómo se va desarrollando esta actuación integral», declara. Lo que también tiene claro el máximo representante del Gobierno regional en la provincia es que esta actuación, aparte de generar «ilusión y satisfacción», levanta unas «grandes expectativas de futuro». «Es un proyecto de los que llamamos tractores, que son proyectos que de por sí solos son importantes, pero que en el momento en que están funcionando permiten que se generen otras iniciativas culturales, sociales, turísticas y económicas no sólo en la capital sino en toda la provincia», explica Robles. 

En la misma línea de opinión se muestra Alberto Rojo, quien opina que esta actuación «es una oportunidad brutal para la ciudad» y cree que la llegada de Prado Extendido representa «un antes y un después en la cultura de la ciudad y también en su desarrollo turístico;  nos sitúa en el mapa de la cultura con uno de los mejores museos del mundo». Así también lo considera Fernando Aguado, quien la califica de «punto de inflexión esta magnífica noticia» para «consolidar la presencia del Museo de Guadalajara en el Intando y adaptarlo a las nuevas exigencias del siglo XXI». Por su parte, la presidenta de la Asociación de Amigos del Museo de Guadalajara, Elena García, califica de «propuesta muy positiva y enriquecedora» la actuación prevista para el edificio más emblemático de la provincia ya que abren magníficas oportunidades para «que el Museo de Guadalajara se adapte a los nuevos tiempos, sea más conocido y visitado» y se puedan crear «nuevas sinergias y colaboraciones» con otras instituciones culturales como es el propio Museo del Prado. 

Primera ciudad

Hay que señalar que Guadalajara es la primera ciudad que el Ministerio de Cultura confirma que formará parte del nuevo Prado Extendido, que se presentó el pasado noviembre tras existir modelos de colaboración previa de similar filosofía con entidades como Museo de Bellas Artes de Oviedo y el Museo de Bellas Artes Gravina de Alicante. Según explican fuentes de la pinacoteca, este programa  nació  con el objetivo de «proyectar la colección del Museo en el contexto nacional apostando por una innovadora gestión de sus depósitos que fomenta la presencia, visibilidad y acceso de la colección en todo el territorio español para favorecer su conocimiento y difusión». Existen más de 3.400 obras del Museo del Prado fuera de su sede histórica en  edificio Villanueva o el Casón del Buen Retiro, una realidad apenas conocida por la población.