La crisis del coronavirus obligó a suspender, el pasado 2021, todas las celebraciones relacionadas con el Carnaval. Afortudamente, este año, la  fiesta más desenfadada y burlesca del calendario vuelve con fuerzas renovadas e incluso con más ánimo y alegría tras el parón provocado por la pandemia. Al margen de los clásicos programas con concentraciones, pasacalles y concursos de disfraces que tendrán lugar en la mayoría de las localidades de la provincia, Guadalajara atesora una riqueza carnavalesca única encarnada en botargas y personajes enmascarados de origen ancestral que bien merece la pena conocer como preludio de la Cuaresma. «El Carnaval supone llenar las calles de alegría, de color y, sobre todo, de tradición. Es muy importante que la gente viva y acuda al Carnaval para seguir manteniéndolo vivo y para que todo esto no pare. El año pasado tocó descansar pero ahora venimos, si cabe, con más ganas», asegura Isabel Nolasco, experta en folclore autóctono provincial y miembro de la Asociación La Tradición Oral, colectivo encargado de diseñar la Ruta de las Botargas impulsada recientemente por la Diputación.

Además, el inicio de los trámites para declarar Bien de Interés Cultural las botargas y enmascarados de la provincia por parte de la Junta es «otro motivo más de alegría» que se suma a este esperado regreso del Carnaval. «Esta declaración nos permite tener un poquito más la puerta abierta a que estas manifestaciones se conviertan en Patrimonio Inmateral de la Humanidad por la Unesco», recuerda Nolasco.

La provincia de Guadalajara goza de una rica variedad de manifestaciones tradicionales ligadas al Carnaval y, en general, con el ciclo invernal. Sin duda, si hay una de ellas que destaca por su idiosincrasia y puesta en escena ésa es el Carnaval de Almiruete, que este año cumple 36 años de esplendoroso renacer. Aunque las botargas y mascaritas volverán a desfilar por las calles de esta pedanía de Tamajón, lo harán bajo estrictas medidas de seguridad y distanciamiento con el público. «Va a ser un año de transición y de carácter reducido. El uso de la mascarilla será obligatorio y el público asistente no podrá acceder a la plaza ni al recorrido que hacen los botargas y las mascaritas porque queremos evitar cualquier contagio», explica Miguel Mata, alcalde pedáneo de Almiruete. Y es que, la masiva afluencia de espectadores que esta cita carnavalesca ha congregado en sus últimas ediciones, hace optar por la prudencia. «No hemos querido suspender el Carnaval porque la gente tiene muchas ganas de salir y no queremos que la fiesta se enfríe después de un año de parón, pero preferimos ser prudentes», señala Miguel Mata, quien también detalla que habrá partes del ritual de esta celebración que se cancelarán por este motivo como es el caso de la cena de los botargas y las mascaritas, la petición del somarro por las casas, el lanzamiento de pelusa y confeti entre el público y el ofrecimiento de vino en bota. Además, este año habrá una participación menor de botargas y mascaritas. 

La provincia de Guadalajara atesora una riqueza carnavalesca única encarnada en botargas y personajes enmascarados de origen ancestral. - Foto: L.T. / ArchivoDiablos de Luzón

Los diablos y las mascaritas de Luzón son otra de las citas imprescindibles del Carnaval de Guadalajara. Impulsada por la Asociación Cultural Amigos de Luzón, esta comparsa de impresionantes personajes zoomórficos de color negro hará su aparición en la tarde del sábado para infundir temor y algarabía al son de las dulzainas. «En un principio, pensamos no salir este año tampoco por la pandemia, pero vimos que la situación mejoraba y como todo lo que hacemos es al exterior y teníamos tantas ganas de reecontrarnos, pues al final nos animamos», comenta Rosa Lobo, presidenta de este colectivo vecinal y una las luzoneras que viste de diablo. «Costó mucho recuperar esta fiesta y cuesta mantenerla, por eso nos hace mucha ilusión volver a celebrarla y representar las raíces de nuestro pueblo tanto en este día de Carnaval como en otras concentraciones y eventos que suelen invitarnos. Es un orgullo para nosotros», asegura Rosa Lobo.

No obstante, los seres tradicionales más extendidos en la provincia durante las Carnestolendas son toda clase de vaquillas y vaquillones. Tras su recuperación hace tres años, los Vaquillones de Villares de Jadraque ofrecen una atractiva jornada de sábado que incluye, aparte del recorrido por las calles de una decena de vaquillones adultos y tres infantiles, otras actividades como una degustación de migas para todos los asistentes, la presentación de dos libros, la inauguración de una exposición fotográfica sobre el municipio y, por primera vez, el nombramiento de Vaquillón del Año al escritor e historiador serrrano Tomás Gismera. «Hemos querido dar más realce a este día de fiesta tan importante para nuestro pueblo introduciendo más actividades. Invitamos a todo el mundo a que venga porque se lo va a pasar bien», asegura Fidel Paredes, alcalde de Villares de Jadraque.

Las Vaquillas y Diablo de Luzaga, las Vaquillas de Membrillera, la Vaquilla y Cencerrá de Riba de Saelices, los Vaquillones de Robledillo de Mohernando, las Mascaritas y Tío Alhiguí de Salmerón, las Botargas de Valdesaz y los Vaquillones de Zarzuela de Jadraque son otras de las citas carnavalescas para este sábado. La Vaquilla de Ribarredonda saldrá este domingo y los Chocolateros de Cogolludo harán su aparición, como siempre, el Miércoles de Ceniza. Mientras, la Vaquilla de Anquela del Ducado y el Tío Tararura y Toro de Carnaval de Romanones pospondrán su salida para el sábado  5 de marzo.