Ángel Villarino

RATAS DE DOS PATAS

Ángel Villarino


El ‘método Stanislavski’ de Sánchez

13/06/2025

Los actores tienen a su disposición el 'método Stanislavski' para meterse en la piel del personaje y Pedro Sánchez lo utiliza habitualmente. Ayer dio una lección magistral para interpretar el papel de un presidente asolado por el comportamiento inmoral de sus colaboradores más estrechos. La chaqueta perfecta, la piel morena, los ojos de perro triste, el fondo rojo, la tensión en los labios… La imagen tenía la intensidad de un fotograma de Wong Kar-wai, aunque el "pacto de ficción" ya no hay espectador que sea capaz de respetarlo.
Habría que desplegar un catálogo para describir las tristezas de Sánchez, similar al que tienen los esquimales para referirse a la nieve. Un adjetivo para el presidente enamorado, otro para el presidente atribulado por una gran tragedia, otro para el presidente decepcionado con sus amigos de la Kangoo, otro para las crisis de gobierno. 
Y al igual que ocurre con el clima en las regiones árticas, hay matices que escapan al lenguaje cotidiano. Pero nadie que esté realmente desolado es capaz de decir que "no es perfecto" cuando se le pide que haga autocrítica, como pasó ayer en la rueda de prensa. Si en tu peor momento lo único que se te ocurre decir de ti mismo es que no eres perfecto, entonces, es que tienes desactivado el cuadro emocional entero.
La narración que construye sobre sí mismo se nutre de un conflicto interno y de una lucha constante contra aquellos que, en su visión, traicionan la esencia de su proyecto político. Pero la obra es ya demasiado larga y el público atiende cada vez más aburrido.

ARCHIVADO EN: Pedro Sánchez, Lenguaje