Julia Navarro

ESCAÑO CERO

Julia Navarro

Periodista y escritora


Vacaciones frustradas

07/06/2023

A los dirigentes políticos les sentaría muy bien pisar la calle. Así Pedro Sánchez se enteraría de cómo ha puesto del revés los planes de miles de ciudadanos para este mes de julio, mes en el que según las estadísticas hay un cuarenta por ciento de desplazamientos por vacaciones. Si acudiera a cualquier agencia de viajes encontraría a multitud de ciudadanos desesperados intentando que les devuelvan el dinero destinado a sus vacaciones, también debería de pasarse por cualquier oficina de correos donde se agolpan los ciudadanos para pedir votar por correo. Seguramente no le sentaría nada bien escuchar lo que dicen de él. Y no, no todos los que están fastidiados por la fecha de las elecciones, 23 de julio, son votantes despechados de derechas.
Si damos credibilidad a las estadísticas ese cuarenta por ciento no lo conforman los ricos, como ha dicho alguien desde las filas de la izquierda, sino ciudadanos de a pie que hacen vacaciones en julio lo mismo que otros en agosto. Porque julio y agosto son los dos meses por antonomasia para las vacaciones de verano.
La mayoría de los que se pueden tomar ese respiro vacacional y salir durante unos días de vacaciones son ciudadanos que vienen ahorrando lo que pueden para pagar unos días de vacaciones en la playa, o irse al pueblo de sus padres, o a una casa rural, o incluso a hacer un circuito por Europa o aprovechar una oferta para ir al Caribe. Pero ya digo que son ciudadanos corrientes, sin chalet ni barco, que van ahorrando para las vacaciones.
Sí, se puede votar por correo pero el trámite no es tan sencillo y te fastidia igualmente las vacaciones, lo único es que el día 23 no tienes que depositar la papeleta personalmente, pero lo que se dice veranear en julio es casi imposible. En primer lugar porque tienes que esperar a recibir la documentación para votar y después llevar los sobres a Correos y eso sucederá días antes de la votación. De manera que te parten julio.
En mi opinión la convocatoria de elecciones era obligada después del revés que el PSOE ha sufrido en las urnas, pero podría haberlas convocado para septiembre. Claro que eso le habría causado a él algunos inconvenientes como que en el seno del PSOE empezaran a plantearse su sustitución. Y es que el descontento por el resultado electoral del 28 de mayo es más que evidente por más que ahora Sánchez quiera premiar a los que han perdido colocándolos en las listas electorales del Congreso y del Senado.
Pero ya saben el refrán: ande yo caliente ríase la gente, así que el presidente ha ido a lo suyo fastidiando a millones de ciudadanos. Y lo dicho, le recomiendo que se pase por alguna de las colas que se forman en las oficinas de correo y ponga el oído para enterarse de lo qué piensan sobre la fecha de su convocatoria y sobre él mismo. Claro que seguramente le dará lo mismo.