Los líderes de los países europeos que se reunieron de forma telemática con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, insistieron en que durante la cumbre que mantendrá el próximo viernes en Alaska con Vladimir Putin, para tratar de poner fin a la guerra de Ucrania, debe trasladar al presidente ruso que no es posible ninguna solución sin la participación de Ucrania, sobre todo cuando lo que está sobre la mesa es que ceda la parte del territorio de la que Rusia se ha apoderado durante el conflicto bélico.
De la reunión, a la que asistieron los mandatarios de Francia, Alemania, Reino Unido, Italia, Polonia, Finlandia y los principales líderes de la Unión Europea, a la que no estaba invitado Pedro Sánchez, ha trascendido que el presidente estadounidense ha considerado que los dirigentes europeos que tratan de lograr la paz en Ucrania son "gente extraordinaria". Le ha faltado decir que son "gente encantadora" como la que viajaba en Diane 6, sin aclarar si llevará a la mesa de Anchorage alguna de las pretensiones europeas, que se cifran sobre todo en la declaración de un alto el fuego como condición previa a cualquier negociación de paz.
El hecho de que Pedro Sánchez solo haya participado en la reunión, también telemática, de la "Coalición de Voluntarios", que apoya las posiciones ucranianas de paz segura y sin concesiones territoriales, ha llevado al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, a afirmar que España ha quedado relegada a "segunda división" en las negociaciones sobre Ucrania porque el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, ha sido "insolidario" con los aliados, de lo que se deriva que se encuentre "al margen de los grandes debates" europeos, a pesar de que la posición del Gobierno con respecto a Ucrania ha sido de un apoyo total y los contactos entre Sánchez y Zelensky se han producido a menudo.
La insolidaridad de Pedro Sánchez a la que se refiere Feijóo está relacionada con su decisión de negarse a aceptar la petición de Donald Trump, canalizada a través de la OTAN, para que los aliados inviertan un 5% del PIB en defensa, lo que llevó al presidente de EE UU a afirmar que tenía un problema con España y a amenazar a la economía española por su actitud, sin que el dirigente popular respondiera al chantaje. Al respecto quizá sea preciso recordar las palabras del primer ministro belga, Bart De Weber, anfitrión de la cumbre de la OTAN en Bruselas, cuando afirmó que "nunca una cena me había salido tan cara" y que quizás hubiera sido más interesante apoyar "la posición de Pedro", porque tenía el convencimiento de que muchos países europeos habían jugado de farol y no tienen intención de cumplir con el compromiso del 5%. Item más, sería interesante conocer si Feijóo cumplirá ese compromiso y cuenta de dónde piensa obtener los fondos, si de recortes de servicios o de subida de impuestos. Como considera que las elecciones generales están al caer, tendrá tiempo de explicarlo durante la campaña electoral. Además incluye en el capítulo de la insolidaridad, la decisión del Gobierno de contratar con la china Huawei y mantener puentes con la Venezuela chavista, dos tabúes para Estados Unidos.
Tras la reunión, poco se sabe de los compromisos adquiridos por Trump para la cumbre de Alaska, con lo que se corre el riesgo de que sea la UE en su conjunto la que juegue en la segunda división respecto a Ucrania.