Ha pedido perdón, estaba obligado a hacerlo y lo ha hecho: Pedro Sánchez ha pedido perdón por tener como secretario de organización del partido a un hombre que hoy aparece como un presunto delincuente en el informe demoledor que ha elaborado la UCO.
Sánchez también ha confesado su decepción ante las noticias que colocan a Santos Cerdán en una trama de corrupción y ante la situación de gravedad extrema, ha anunciado una auditoría externa y renovación de la ejecutiva del partido. Si embargo no ha dudado en presentarse como un hombre que "juega limpio" y que no piensa en elecciones porque por encima de todo debe luchar para promover un proyecto de regeneración que transforme la sociedad. No ha desaprovechado la ocasión para presentarse como ejemplo de dirigente político que actúa con firmeza ante la corrupción y que ha dado libertad a las fuerzas de seguridad mientras en el pasado, gobiernos corruptos como el PP "perseguían" a quienes investigaban.
Rostro serio, grave, dedicó más tiempo a defender ese proyecto de regeneración y modelo convivencia, que a abordar el hecho incuestionable de que la corrupción había entrado de lleno en su partido y que afectaba directamente a los dos secretarios de organización que él nombró y eran personas de su máxima confianza.
Según el informe de la UCO, Santos Cerdán manipuló papeletas de las primarias del 2014 para que Sánchez fuera secretario general del partido. No le dio importancia, alegó que había ganado esas primarias por miles de votos … sin dar relevancia al hecho de que alguien de su entorno intentara hacer trampas. Tampoco hizo referencia, en el día en el que pedía perdón por la corrupción, que desde su propia ejecutiva y desde su gobierno se ha difamado a la UCO y a los jueces y fiscales que tratan de luchar contra esa corrupción que se vivía en algunos despachos del Psoe y del gobierno.
Pedro Sánchez vive los días más graves de su mandato. Pero no se inmuta, mira siempre hacia otro lado. No da muestras de sentirse concernido políticamente con su mujer, hermano el ex secretario de organización imputados, más el Fiscal General procesado. Y ahora, ha tenido que obligar a dimitir y renunciar a su escaño al nuevo secretario de organización del partido nombrado por él mismo haca poco más de un año aunque ya se publicaban informaciones sospechosas sobre sus actividades presuntamente delictivas.
Como se suponía a lo largo de un día plagado de tumores, Sánchez no piensa tomar la decisión más lógica ante una situación ante la que cualquier dirigente político democrático, renunciaría a su puesto. Alguno incluso, para reforzar más actuación ejemplar de sí mismo y salvar la imagen de su partido, convocaría elecciones. Pero Sánchez está hecho d eotra madera: resistir hasta la muerte, caiga quien caiga. Aunque esa actitud destroce biografías de hombres y mujeres que siguen confiando en él.
Está decidido a aguantar hasta el 2027. Mientras, la UCO sigue investigando. Pero después del informe conocido este jueves, con un trabajo riguroso de la guardia civil, ya no sabe refugiarse en que lo que cuentan los medios de comunicación son bulos y fango.