Tanto las dos patronales representadas en el sector (CEOE-Cepyme y UNO) como los sindicatos (UGT y CCOO) aseguran que no es el final que les hubiera gustado pero, desde esta misma noche, y ante la falta de acercamiento de posturas, los 40.000 trabajadores empleados en la Logística en la provincia de Guadalajara, fundamentalmente en el Corredor del Henares, están llamados a tres jornadas de paros totales (14, 15 y 16 de noviembre) que podrían dar paso a una huelga indefinida a partir del día 17 si, finalmente, no llegar a un acuerdo que la evite.

Tras una dura y extensa jornada de negociaciones que se ha prolongado durante unas diez horas, patronal y sindicatos no han conseguido llegar a un acuerdo en la firma del convenio colectivo del sector para el periodo 2023-2025, lo que ha se está empezando a dejar notar a la entrada de las empresas del sector con la colocación de piquetes informativos. 

Desde la Patronal, el secretario general de CEOE-Cepyme en Guadalajara, Javier Arriola, lamenta que esta negociación haya tenido que venir presidida por una amenaza de huelga previa que en nada ha beneficiado y asegura que las empresas no han podido ceder más de lo que lo han  hecho. "Ahora tocará reflexionar a todos, pasar estos días de huelga que no benefician a nadie y volver a sentarse a la mesa".

Arrancan los paros en el sector logístico de Guadalajara ante la falta de acuerdo con las patronales - Foto: La Tribuna

Hace apenas una hora que un par de horas que se han levantado de la mesa y, aunque Javier Arriola cree que ahora es conveniente dejar "enfriar las tensiones" de este duro e intenso día,  no niega que por parte de la CEOE no van a tener ningún problema en volver a sentarse, pero "tendrá que ser con planteamientos responsables, algo que cree que no se ha dado hasta ahora en el caso de UGT, que "se ha equivocado" metiendo en la negociación un elemento "distorsionador" como es el de la cuarta paga.

Para el secretario general de CEEO en Guadalajara, tenían tiempo para haber seguido negociando sin necesidad de meter "esa presión" que es la convocatoria de una huelga y ahora "cada uno tendrá que apechugar con sus decisiones". "Los acuerdos necesitan calma y tiempo y si hay una amenaza de huelga, todo se tensiona", ha subrayado, considerando que los sindicatos, con esta decisión, lo que han hecho es llevar a sus trabajadores a una "huida hacia adelante" que, además, "no era necesaria".

"Había muchos puntos de acuerdo y, ahora, cada uno tendrá que asumir la responsabilidad de lo que esto supondrá en costes tanto a empresarios como ha trabajadores", ha subrayado, insistiendo en que la ruptura de las negociaciones no ha sido por un punto concreto sino por una conjunción de cuestiones, en especial, la cuarta paga con la que se desmarcó UGT, que desde la patronal siempre han considerado una "línea roja", ha insistido. 

"Han jugado con nosotros de una manera mezquina y total", ha dicho por su parte el secretario provincial de CCOO, Javier Morales, para quien ahora "habrá que darle una pensada" a esta situación porque "habrá que medir fuerzas".

Para Morales, el no abono de los sábados y una subida insuficiente en el convenio para 2023-2025 son varios de los puntos discrepantes que les han llevado a la convocatoria de estas tres jornadas de paros que, en el caso de Marchamalo ya comenzaban a verse las consecuencias con la presencia de piquetes informativos a la entrada de alguna empresa.

"Cuanto más tarde será más difícil ponerle una solución. No queríamos esto, vamos a sacar la huelga y obligarles a que se sienten", ha insistido, convencido de que en su sindicato al menos no contemplaban este escenario sino que estaban esperanzados en haber alcanzado un acuerdo. 

Los piquetes ya están colocados en los accesos a polígonos como el de Marchamalo y Ana González, secretaria general de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo (FEsMC) de UGT en Castilla-La Mancha, lamenta que las discrepancias "fueran ya en todo".

Según González, la última propuesta de los sindicatos ha sido la de rebajar del 5% al 4% la subida salarial para el primer año y al 4,5% para 2024 y 2025, y que sábados domingos y festivos  fueran retribuidos con 20 euros más, cuestiones que no han sido aceptadas. "Las patronales han dicho que no", afirma González lamentando lo ocurrido pese a que estuvieron "hasta el último minuto" haciendo lo posible para tratar de cerrar un acuerdo. "No han querido negociar y nos obligan a ir a la huelga". "Es una patronal absolutamente cerrada a la negociación", ha remarcado la sindicalista de UGT.

Desde UGT denunciarán este mismo martes ante la Inspección de Trabajo como algunas de las grandes empresas de logística están contratando autobuses para llevar a los trabajadores del sector estos días a sus puestos de trabajo, empleados que hasta ahora iban en sus propios coches pero a quienes de se intenta presionar y vulnerar su derecho a la huelga con estos planteamientos, ha subrayado.