A la llegada de la reunión de la junta directiva del pasado martes en La Jonquera (Gerona), el presidente del Barcelona, Joan Laporta, citó al técnico, Xavi Hernández, a un encuentro en el Camp Nou junto con la cúpula ejecutiva, una reunión en el que entrenador fue informado de los parámetros económicos existentes para diseñar la plantilla de la próxima temporada.
El preparador azulgrana realizó una propuesta de máximos y otra de mínimos; e informó al equipo directivo de las reuniones que en los últimos días ha mantenido con diversos jugadores con los que no cuenta para el próximo curso.
Y es que el cuadro culé tiene claro que es necesario rebajar la masa salarial para acometer contrataciones y adecuarse al 'fair play' financiero, el dolor de cabeza que tiene después de las pérdidas económicas acumuladas en los últimos cursos y que son un lastre que le han obligado a vender parte de sus activos.
Nada más llegar de La Jonquera, donde la junta convocó una asamblea extraordinaria de socios (16 de junio) para pedir autorización para emprender diferentes acciones que ayuden a cerrar el actual ejercicio antes del día 30 y a reforzar la plantilla para el próximo curso 2022/2023, Laporta se reunió con Xavi para agilizar procesos.
Las diferentes propuestas podrían suponer hasta 740 millones de euros, según diferentes estimaciones, y pasan por la venta del 49,9 por ciento de Barça Licensing&Merchandising, S.L: (BML), la compañía que gestiona las tiendas, y hasta el 25 por ciento de los derechos de televisión.
La cesión de la venta del 25 por ciento de los derechos audiovisuales podría producirse, según el club, «a uno o más inversores» y parece que el acuerdo con el fondo de inversión británico CVC, lo que supondría aliarse con LaLiga, no es el único que el Barcelona tiene sobre la mesa.
Abrazar el acuerdo con CVC podría suponer que los 540 millones computaran como ingreso y no como deuda, si en la operación se implica además a otro actor, como Goldman Sachs.
Un as en la manga
En todo caso, en las oficinas del Camp Nou siguen atentos al mercado y a las cuentas. De hecho, el club tiene un as en la recámara, ya que podría vender el 49 por ciento de Barça Studios, algo ya aprobada por la asamblea.