La preocupación por los casos de conductas autolíticas, trastornos de las conductas alimentarias, depresión, sentimientos de fracaso escolar, mal uso de las redes o el consumo de drogas, entre otras causas, ha motivado que el Centro Asociado de la Uned en Guadalajara, a través del servicio de Psicología Aplicada, y con el apoyo del Ayuntamiento, hayan apostado por llevar a los colegios programas sobre cómo detectar y prevenir algunas de estas conductas. También se ha creado la Escuela de Madres y Padres, cuyo fin es trabajar con la familia los comportamientos autolíticos en niños y adolescentes, «al ser el sector más vulnerable», señala Edurne Esteban, coordinadora del servicio de Psicología Aplicada del Centro Asociado de la UNEDen Guadalajara. «Había una necesidad de abordar estas cuestione ya que a raíz de la pandemia los datos se a disparan. Entre los 15 y los 29 años, el suicidio constituye una de las principal causa de muerte», señala. En principio, son seis las sesiones que contempla el programa. La última concluirá el próximo 16 de mayo. En cuanto al propósito, persiguen facilitar a los padres información contrastada sobre cómo proteger a los menores, cómo detectar posibles alarmas o conductas de riesgo, y qué recursos existen a la hora de enfrentarse a algún caso. «Lo primero que diría a los padres es que si se han dado cuenta que están pidiendo ayuda, eso es ir por el buen camino», remarca Edurne Esteban.  

Al hilo de ello, para los días 30 de mayo y 6 de junio también se han organizado dos jornadas formativas de prevención de conductas autolíticas, en este caso dirigidas a toda la población en general (familias, trabajadores sociales, docentes...). Se desarrollarán de seis a ocho de la tarde, en el Centro Municipal Integrado Eduardo Guitián. 

buscar ayuda. Para la coordinadora del servicio de Psicología, «la prevención siempre es la mejor medicina, pero una vez que estamos inmersos en la problemática hay que buscar ayuda. No evitemos el problema, hay que hablar de ello, de la muerte y de cómo se siente uno. Eso es ya un factor de prevención y protección muy grande. Pero siembre debe hacerse buscando el lado profesional y no pensar que es algo tabú», abunda la especialista, a la par que insiste en que ante cualquier problemática es muy importante hablarlo. «No se pueden meter los problemas debajo de la alfombra», concluye.