La consellera de Presidencia, Laura Vilagrà, ha advertido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que sin un referéndum de autodeterminación el conflicto político catalán "no se acabará", por lo que ha sugerido que la Moncloa aún tiene "muchos deberes" pendientes con el independentismo.
En una entrevista con EFE, la número dos de la Generalitat e interlocutora directa con el Gobierno en el marco del proceso de diálogo abierto entre ambos ejecutivos ha destacado los avances logrados en esa mesa de negociación, pero ha dejado claro que el objetivo de ERC es abordar ahora la carpeta del referéndum.
"El proceso independentista no ha muerto", ha afirmado Vilagrà, replicando a las palabras de Sánchez hace unas semanas. "Había dos carpetas: la primera, la de la desjudicialización, que para nosotros aún tiene recorrido. Y después la de la autodeterminación, para que en Cataluña podamos decidir nuestro futuro político".
Si bien la consellera ha exhibido los "resultados" logrados en la desjudicialización -como los indultos, la derogación del delito de sedición o la reforma del de malversación-, ha considerado que ese camino deber culminar en una "amnistía" definitiva.
Pero el plan de la Generalitat para 2023 pasa sobre todo por explorar la posibilidad de pactar un referéndum: la hoja de ruta del president Pere Aragonès, siguiendo la vía canadiense, apuesta por articular este año un Acuerdo de Claridad, que se produciría tras un debate interno en Cataluña y la suma de alianzas con actores políticos, económicos, sindicales y sociales.
Una vez articulada esa propuesta catalana -que fijaría las condiciones para ese referéndum-, se trasladaría a la negociación con el Estado, para pactar entonces la hipotética consulta.
La consellera se ha mostrado convencida de que, a pesar de que las posturas están "alejadas", ambos gobiernos podrán "trabajar" esta cuestión y permitir esa consulta.
"Sabemos que es complejo y que el camino no será fácil, pero estamos absolutamente convencidos de que es la línea para conseguir que el conflicto político se acabe. Sin la votación de la ciudadanía de Cataluña, el conflicto político no se acabará", ha apuntado.
"Quedan muchos deberes por hacer con el independentismo"
Vilagrà, una de las principales piezas del engranaje de la mesa de diálogo y con interlocución directa con el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, ha evitado dar detalles sobre los contactos discretos entre ejecutivos, pero ha sugerido que el Gobierno "sabe" que ERC quiere "trabajar esta cuestión" y que "con el independentismo hay muchos deberes aún por hacer", entre ellos el referéndum.
Porque, ha avisado, el presidente Pedro Sánchez "se estaría equivocando si pensara que solo por haber abierto la línea de la desjudicialización el conflicto se ha acabado. Al contrario, el conflicto sigue vigente. Simplemente mirando para otro lado no se acabará. Esa carpeta, más pronto que tarde, la tienen que abrir".
Y sobre si ERC dará apoyo a Sánchez en una futura investidura si no aceptara esas demandas, la dirigente ha opinado que su partido deberá ver "qué da de sí esta legislatura" y, entonces, "valorar cuál ha sido el éxito de esta vía y qué resultados se han obtenido".
Confía en que los comunes se sumen al acuerdo de claridad
Esta semana, la líder parlamentaria de En Comú Podem, Jéssica Albiach, aseguró que en el Parlament no hay "una mayoría suficiente" para el pacto de claridad que defiende Aragonès, al que emplazó a convocar la mesa de partidos catalanes para decidir "entre todos" cuál es "la gran propuesta de país".
No obstante, Vilagrà ha recalcado que el Govern aspira a sumar finalmente a los comunes a ese acuerdo de claridad al estilo de Canadá con el Quebec: "Lo primero es llegar a acuerdos en Cataluña y lograr apoyos en Cataluña. Las ideas a menudo necesitan una cierta maduración para que tiren adelante y en próximos meses trabajaremos para poder obtener una coalición potente para ir fuertes a Madrid".
El Govern "evidentemente cuenta con un partido como En Comú Podem", ha insistido, no solo para que se sumen a esa "coalición" para el referéndum, sino también que "aporte propuestas" al respecto y "mejore" el planteamiento que la Generalitat lleve a Madrid.