El centro de salud de Sigüenza es el punto de referencia sanitaria para los casi 4.400 habitantes de la Ciudad de El Doncel y sus 28 pedanías, además de los habitantes de los municipios de Huérmeces del Cerro, Baides, Viana de Jadraque, Almadrones, Mirabueno, Castejón de Henares y Villaseca de Henares, a los que habría que sumar otras localidades más pequeñas de alrededor. En este dispositivo sanitario hay cinco plazas de médico de las que hay dos sin cubrir. En este momento, trabajan dos médicos a tiempo completo, uno a tiempo parcial porque sólo presta servicio siete horas a la semana por una liberación sindical del 80% de su jornada y, desde hace 20 días, hay un facultativo que, con un contrato temporal de tres meses, atiende un día a la semana a Mandayona y los otro siete pueblos mencionados. 

En verano, por vacaciones y bajas laborales, los alcaldes de estos municipios denuncian que han tenido momentos que les han causado preocupación. El alcalde de Castejón de Henares, Carlos Piña, o de Viana de Jadraque, Rosario Mora, relatan a este periódico cómo, este verano, al sólo haber dos médicos en el centro de salud de Sigüenza, han vivido algún momento de tensión porque uno de esos dos médicos había salido a atender alguna urgencia, y, por ello, los pacientes que acudían con otra emergencia han tenido que trasladarse a Guadalajara, o bien el otro facultativo ha tenido que atender a más de un centenar de personas solo. Tanto Carlos Piña como Rosario Mora lamentan, junto al alcalde de Mandayona, Óscar Relaño, cómo, después de la marcha de la doctora titular en mayo, la persona que contrataron «duró sólo 20 días» porque no pudo «soportar» la carga de trabajo asignada.   

Y es que el temor que manifiestan los alcaldes y vecinos de la zona afectada es que no se restituya al completo el servicio sanitario.

El alcalde de Castejón de Henares denuncia que desconocen qué días pueden solicitar citas. - Foto: Javier Pozo

«El problema es que, cuando te quitan las cosas, como no lo protestes y  no lo defiendas, al final, te quedas sin ellas», denuncia Carlos Piña. «La gente está cansada de que nunca ha estado la sanidad bien. Esto no viene de ahora. Este centro de salud, en especial, ha funcionado siempre mal. Ahora, se ha agravado y la gente está muy quemada», añade Óscar Relaño, quien recuerda que su municipio tiene una residencia de mayores con 50 plazas y que «hay personas que tienen muchos años y que no pueden ir ni en coche ni en transporte a la demanda» hasta Sigüenza. 

Por su parte, Antonio Rebollo, alcalde de Almadrones, señala que es «la pescadilla que se muerde la cola. Nosotros contábamos con 70 u 80 tarjetas sanitarias y a día de hoy, contamos con 30 escasas porque han ido bajando los servicios», haciendo retrospectiva de 12 años atrás, cuando tenían dos días de médico asignado en su pueblo. «Ahora mismo, debería acudir una vez a la semana unas horas, pero el centro médico lleva hecho desde el año 2019 y no lo han estrenado. Nos hemos quedado sin médico pero que, cuando había médico, tampoco subía.  Nos obligaban a ir a Sigüenza o Mandayona», lamenta.

«Nos sentimos bastante abandonados», confiesa Rosario Mora que considera que «a muchas personas mayores, si están solos y no tienen asistencia médica, se los tendrán que llevar».
La alcaldesa de Sigüenza, María Jesús Merino, reconoce que ha «mantenido varias reuniones con la delegación de Sanidad, he podido hablar con el consejero, sé que hay voluntad de solucionar este problema y que no es un problema presupuestario, las plazas están dotadas, pero no se encuentran médicos que quieran venir a la zona rural», añadiendo que «la sanidad, la educación y el transporte son los servicios fundamentales que todos sabemos que tenemos que mantener para que la gente no se vaya de nuestro medio rural». 

El alcalde de Almadrones asegura que el centro médico está sin estrenar. - Foto: Javier Pozo

En esta misma línea, se manifiesta Laura García Puebla, vecina de Mandayona: «Sabemos lo que ocurre en los pueblos, te quitan un servicio y, en cuanto están un tiempo, ese servicio desaparece. El problema no es tanto para la gente de mi edad, que sí que te puedes desplazar a Sigüenza, como para la gran parte que tiene una edad considerable y no conduce o no se puede estar trasladando a Sigüenza».

«Están con la España vaciada y, no es que no nos den, es que nos quitan lo que tenemos. Estamos abandonados. Estoy sana, pero si tienes alguna patología, claro que te tienes que ir. No te queda otra», corrobora Esther Ruiz, también vecina de Mandayona.