Este miércoles, 24 de mayo, tras su desconexión de la red eléctrica a las 2.34 horas, la central nuclear de Trillo ha iniciado su 35 Recarga. De esta manera ha dado comienzo una parada en la que se han incorporado a la instalación más de 1.000 trabajadores adicionales a la plantilla habitual de unas 40 empresas colaboradoras especializadas.
Según ha informado la propia central en un comunidad de prensa, la mayoría de estos profesionales proceden del entorno de la nuclear.
Con una duración de 32,5 días, durante este periodo se realizará la renovación de los elementos combustibles, la ejecución de pruebas requeridas por las Especificaciones de Funcionamiento y la revisión o prueba de instalaciones, equipos y componentes necesarias para asegurar el correcto funcionamiento de la planta en el siguiente ciclo de operación.
El programa de esta 35 Recarga contempla la ejecución de más de 4.000 actividades entre las que destacan la revisión de una bomba principal de refrigeración del reactor, el cambio del transformador principal (AT03) de manera preventiva y las revisiones de un tren de válvulas piloto del sistema de Vapor Principal, de la turbina de baja presión 3 y de la redundancia 2/6.
Además, se implantarán modificaciones de diseño destinadas a finalizar programas de trabajo iniciados en años anteriores, adecuar las instalaciones a los nuevos requisitos industriales o mejorar la disponibilidad de la instalación.
La Central Nuclear de Trillo suministra el 3% de la demanda eléctrica anual de toda España. Durante 2022, registró una producción de energía eléctrica bruta de 8.224 GWh, lo que supone el 4,5 % de la energía libre de emisiones de CO2 producida en España.
"Sus excelentes indicadores de funcionamiento reflejan la fiabilidad y estabilidad de su operación, contribuyendo a que, sin emisiones de CO2 a la atmósfera, la energía nuclear siga siendo la tecnología que produce más de un 20 por ciento de la electricidad nacional", han destacado desde la propia central.