Cifras estremecedoras ante la primera encuesta sobre violencia contra la mujer que se realiza dentro del marco del Sistema Estadístico Europeo (SEE), cuya coordinación lleva a cabo Eurostat. Según los resultados, 4,8 millones de mujeres en España (un 28,7 por ciento del total) han sido víctimas de algún tipo de violencia machista en el ámbito de la pareja o la expareja, una cifra mayor (38,4 por ciento) en el caso de las jóvenes.

En concreto, el Ministerio de Igualdad en funciones detalló que un 27,8 por ciento afirma haber sufrido violencia psicológica; un 12,7 por ciento física, incluidas amenazas; y un 6,7 por ciento sexual. 

Siguiendo los datos publicados, el departamento de Irene Montero apuntó que la mayor prevalencia de la violencia psicológica se explica porque los malos tratos que se ejercen contra las mujeres no se producen de manera repentina, sino que es el resultado de un proceso de maltrato psíquico más prolongado que va aumentando en intensidad y frecuencia. De hecho, los estudios constatan que siempre que existe un ataque físico, se ejerce también el psicológico.

Además, hay una baja autopercepción de la violencia sexual en la pareja o expareja, ya que -según señala- las víctimas siguen sin identificar o temen desvelar los abusos que han ejercido contra ellas en este ámbito. Entre ellos, destaca la coerción o el chantaje que se ejerce para tener relaciones sin el consentimiento de la otra persona o la obligación de mantenerlas sin preservativo, entre otras.

La Encuesta Europea de Violencia de Género 2022 (EEVG) destaca que la población más joven (entre 18 y 29 años) refieren más casos de malos tratos. Así, un 38,4 por ciento de las mujeres de entre 18 y 29 años asegura haberlos padecido, frente al 19 por ciento de aquellas que tienen entre 65 y 74 años.

En este caso, Igualdad señala que la avanzada edad o la indefensión aprendida durante décadas puede llevar a no desvelar o identificar la violencia «ante un escenario de desesperanza futura».

En cuanto a fuera del ámbito de la pareja, un 20,2 por ciento asegura haber sido víctima alguna vez desde los 15 años de algún tipo de violencia, ejercida «de manera abrumadora por hombres», especialmente en el caso de la sexual (el 94,2 por ciento de los agresores son varones), que es más grave cuanto más cercana es la relación entre ambos.

Concretamente, el 77,5 por ciento de las mujeres que han sufrido una violación fuera de la pareja afirma que su agresor era un hombre conocido.

Redoblar esfuerzos

Finalmente, los datos -en la misma tendencia que otras encuestas o la Macroencuesta de 2019- señalan que la mayoría de las mujeres que han sufrido violencia física o sexual en la pareja no buscan apoyo en las principales instituciones encargadas de acompañar en el proceso de reparación. 

«Es una cifra alarmante que solo un 16,3 por ciento de las mujeres acudan a servicios especializados o que únicamente el 24,4 por ciento haya contactado con la Policía», lamenta Igualdad, que alerta que los resultados en el caso de la violencia fuera de la pareja son aún más preocupantes: solo el 8,9 por ciento se atreve a denunciar.

 «Estos datos demuestran que las instituciones públicas y los sistemas de recuperación integral para las víctimas de todas las formas de violencia contra las mujeres deben redoblar de manera inmediata todos sus esfuerzos para que todas las mujeres puedan acceder a su derecho a la reparación integral», agrega el departamento.