Las calles de decenas de ciudades de Birmania se han llenado este domingo de cientos de personas en el comienzo de los funerales por las más de cien víctimas mortales de la represión de las fuerzas de seguridad durante las protestas de la víspera, día de las Fuerzas Armadas, en el día más sangriento desde el inicio de las manifestaciones contra el golpe de Estado de febrero.
Las procesiones fúnebres se llevaron a cabo en ciudades como Rangún, Meiktila, Monywa y Mandalay, según coinciden medios locales como Mizzima, Khit Thit News y RFA.
La represión de las fuerzas de seguridad dejó este sábado al menos 114 muertos en el país, hasta elevar a 423 el número de fallecidos durante la represión, según la Asociación de Asistencia a Presos Políticos (AAPP).
La violencia persiste este domingo, no obstante. De momento se tiene constancia de una mujer fallecida y otras dos heridas cuando los hombres armados del régimen golpista abrieron fuego contra los manifestantes en Myingyan. La víctima es Zin Mar Aung, de 24 años, quien recibió un disparo debajo a media tarde (hora local).
Asimismo, los residentes cerca del municipio de Hlaing han denunciado que los soldados han arrojado granadas a algunos manifestantes. Sin embargo, no hubo informes inmediatos de muertes o muertes.
"Desde esta mañana el Ejército ha disparado en nuestros vecindarios", ha declarado Hnin Yu, una residente de 24 años. "La gente tiene miedo de salir y algunos resultaron heridos. Todavía están disparando".
Desde la oposición democrática han calificado ya la jornada de ayer como Día de la Vergüenza de las Fuerzas Armadas, con el Comité en Representación del Parlamento de la Unión (CRPH), una suerte de gobierno democrático clandestino formado tras el golpe por los parlamentarios electos de la Liga Nacional para la Democracia, a la cabeza.
Entre las víctimas mortales habría una niña de 13 años, según las fuentes del Myanmar Now, así como un joven de 21 años, identificado como Chit Bo Nyein, capitán del equipo sub-21 del club de fútbol del Hantharwady United, que recibió un disparo de las fuerzas de seguridad cuando ayudaba en la tetería de su familia en la localidad de Insein, en Rangún, según testigos a DPA.
Además, 'Myanmar Now' ha informado de un bebé de un año herido tras recibir el impacto de una bala de goma en Mayangone, en Rangún, cuando jugaba en la calle cerca de un contingente militar.