UGT cierra una nueva crisis con la elección de Luis Manuel Monforte como secretario general en Castilla-La Mancha, tras recibir el 83 por ciento de los apoyos del Comité Regional. El hasta ahora número dos de la UGT regional asume el cargo vacante tras la dimisión  por sorpresa de Olga Arribas, que pasa a ocupar un puesto dentro del organigrama federal del sindicato.

Cabe recordar aquí que Arribas apenas ha llegado a estrenarse en el cargo -fue elegida hace  3 meses-, pese a que su llegada venía cubrir más de un año de interinidad en el sindicato, tras la dimisión de Carlos Pedrosa en diciembre de 2019.  

Con todo, desde UGT se insiste en que el nombramiento de Monforte no afecta al proyecto iniciado esta primavera por el sindicato. De hecho, la ejecutiva elegida en el congreso regional se mantiene, con la incorporación de Begoña García, como responsable de Formación y Proyectos.

El secretario general del sindicato, Pepe Álvarez, ha arropado este miércoles el cambio en Castilla-La Mancha, insistiendo en que se trata de un mero ‘retoque’, «con la idea de continuar el trabajo inicial, con una dirección joven, con muchas ganas, muy implicada en los problemas diarios de Castilla-La Mancha y con ganas de romper las viejas costumbres con un sindicalismo muy reivindicativo». 

El nuevo secretario regional de UGT también ha insistido en este mensaje de continuidad, explicando que se trata de «un relevo natural» tras la dimisión de Olga Arribas, que ha estado motivada porque ha pasado a ocupar puestos de responsabilidad en el ámbito nacional del sindicato.

No obstante, sí reconoce que  llega a la secretaría general del sindicato «en un momento difícil y complejo porque estamos en pleno proceso de recuperación de esta crisis brutal, sanitaria, económica y social», que ha generado la pandemia de coronavirus y que «también ha azotado a Castilla-La Mancha».