Álvaro Cervera lleva mucho tiempo en esto, demasiado, como para que se la 'cuelen': ese Real Madrid «mermadísimo» por las bajas era carne de 'partido trampa'. Cualquiera de los once que dispuso Ancelotti el domingo por la noche en el Bernabéu sería titularísimo, incluso cojo, en el Cádiz. Como en el sitio del Álamo o en las películas bélicas de clara inferioridad numérica, solo la estrategia puede ayudarte a resistir. No hay otra consigna. ¿Cazar una contra y meterla? Claro, pero quedarte desguarnecido por montarla y encajar algún gol era un riesgo que el cuadro andaluz, asfixiado por la clasificación, no quiso correr. Desde que se computan estos datos, el Atalanta posee el récord de disparos realizados sin haber marcado (45 al Empoli hace dos años). El Real Madrid 'solo' hizo 36. Otro 0-0 más para la colección de la Liga. 

Un hueso duro

Es el equipo menos goleado, el tercer goleador, el segundo en posesión, el que mejor juega en largo, el segundo con mejor ratio disparos-goles... El Sevilla es un hueso durísimo y Lopetegui ha ido afinando el estilo con paciencia: el primer año fue cuarto, el segundo batió el récord de puntos (77) en la historia hispalense y este tercero camina hacia una marca aún mejor. Es el único que aguanta el ritmo del Real Madrid (podría ponerse a tres puntos si vence hoy al Barça en partido aplazado) y, por si fuera poco, le acompaña ese 'factor suerte' tan necesario para mantenerse en las alturas. La alternativa también viste de blanco. 

COVID

La UEFA acaba de 'eliminar' definitivamente al Tottenham de la Conference League: no pudo jugar el último partido del Grupo G ante el Stade Rennais (tenía que ganarlo para superar al Vitesse) debido a un brote de coronavirus en el vestuario londinense. 0-3, resultado burocrático. Ahora que los equipos empiezan a presentar cuatro, seis, ocho bajas... ¿En qué punto va a pararse el campeonato antes de tener que aplicar una normativa tan injusta, absurda y antideportiva como la que han sufrido los 'spurs'?