Hallan el enterramiento humano más antiguo de África

Europa Press
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Un equipo de científicos españoles, entre los que estaba el director científico del MEH, Juan Luis Arsuaga, descubren en Kenia los restos de un niño de unos 3 años que permitirán descifrar como interactuaban en la Edad de Piedra Media con los muertos

Hallan el enterramiento humano más antiguo de África - Foto: JORGE GONZALEZ/ELENA SANTOS

Científicos españoles han participado en el hallazgo del enterramiento humano más antiguo conocido hasta la fecha en África, según han informado desde el Museo de la Evolución Humana (MEH) de Burgos.

El descubrimiento, publicado en la revista Nature, es el resultado de un estudio coliderado por el Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana (CENIEH), el Instituto Max Planck para la Ciencia de la Historia Humana (MPI-SHH, Jena) y los Museos Nacionales de Kenia (MNK, Nairobi), en el que también ha participado el director científico del MEH, Juan Luis Arsuaga.

El estudio, que es el resultado de unas excavaciones iniciadas en 2010, contribuye con nuevos datos al conocimiento sobre cómo las poblaciones de la Edad de Piedra Media interactuaban con los muertos.

Hallan el enterramiento humano más antiguo de ÁfricaHallan el enterramiento humano más antiguo de África - Foto: Jorge González y Elena Santos

En 2013 se encontraron los primeros fragmentos de hueso pero no sería hasta la excavación de 2017 cuando la cavidad en la que se hallaba el cuerpo quedó completamente expuesta.

Se trata de una cavidad circular situada a unos tres metros por debajo del suelo actual de la cueva, rellena de sedimento y una acumulación de huesos frágiles y muy degradados por el paso del tiempo.

Una vez escayolado, debido a la delicadeza de los restos, el bloque fue transportado primero a Nairobi y luego a Burgos, para su excavación y análisis especializado en los laboratorios de Conservación y Restauración, Arqueometría, Cartografía Digital y Análisis 3D, y Microscopía y Microtomografía Computarizada del CENIEH.

Este análisis confirmó que los restos óseos pertenecían a un niño humano de 2,5 a 3 años de edad que fue apodado 'Mtoto', que significa "niño" en suajili.