Yebes y la UAH firman un protocolo para la investigación

Redacción
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El objetivo es la realización de actividades que redunden en beneficio mutuo, en especial, en el apartado de la protección de los recursos naturales, la promoción del voluntariado y el asesoramiento en programas y proyectos

Yebes y la UAH firman un protocolo para la investigación

La consecución de los fines comunes y la realización de actividades que redunden en beneficio mutuo y en el logro de sus respectivos propósitos, con especial referencia a los relacionados con la investigación, el desarrollo y la innovación, en especial, en el campo del medio ambiente. Pero también en el apartado de la protección de los recursos naturales, la promoción del voluntariado, la divulgación del conocimiento del medio natural, la socialización, la transferencia del conocimiento y el asesoramiento en los programas y proyectos medioambientales adelantados por el Ayuntamiento de Yebes. Son los fines del Protocolo General de Actuación que han suscrito el Ayuntamiento de Yebes y la Universidad de Alcalá para dar carta de naturaleza y oficialidad a la relación que ambas entidades iniciaron el pasado año con la autorización de sendos proyectos científicos para el estudio de dos especies de botánica y fauna que habitan el bosque de Valdenazar. “De esta relación bilateral y las sinergias que se deriven se beneficiarán profesores, alumnos y los propios vecinos”, opina Miguel Cócera, alcalde de Yebes.

La Universidad de Alcalá de Henares tiene un interés patente en el funcionamiento de los ecosistemas terrestres de la Península Ibérica y el bosque de Vadenazar es un paraje inmejorable para avanzar en este conocimiento por diversas razones. Por su masa forestal, que está compuesta de encinas y quejigos que son las especies forestales dominantes en España, un requisito indispensable para extraer conclusiones extrapolables a otros ecosistemas forestales autóctonos. Además, desde el punto de vista ecológico es un escenario de contrastada biodiversidad y calidad ambiental, que incluye una abundante comunidad de depredadores cuya presencia revela el buen funcionamiento de este entorno. “A estos factores hay que añadir las restricciones al público que minimizan el estrés a la fauna y posibilita que los animales muestren patrones naturales de comportamiento”, aprecia Vidal Gaitán, concejal de Medio Ambiente. Que pone como ejemplo la parada biológica decretada el pasado año, que ha devuelto el ritmo vital a la fauna.

El Protocolo General de Actuación firmado entre ambos organismos públicos tiene un plazo de vigencia de tres años, transcurrido el cual ambas partes podrán prorrogarlo de común acuerdo por un periodo máximo de cuatro años más. Gaitán pone de manifiesto la relevancia de esta alianza con una institución de acreditada solvencia y prestigio reconocido en el ámbito docente e investigador. “Que una entidad como la Universidad alcalaína haya se haya fijado en nuestro municipio solo puede depararnos ventajas y aprendizajes mutuos”, esgrime el edil de Medio Ambiente. Que un hábitat como Valdenazar que hace apenas seis años estaba “abandonado a su suerte y convertido en espontáneo vertedero de escombros y desechos” sea hoy un banco de pruebas para el desarrollo de proyectos de investigación de primer nivel “compensa los esfuerzos que estamos haciendo para recuperar este espacio natural y convertirlo en un escenario para la educación medioambiental y ecológica y la divulgación”.

El proyecto MetaFit de monitorización ecológica a largo plazo, es el primer proyecto de su clase en España, que caracterizará la dinámica de dos especies de roedores mediterráneos: el ratón de campo y el ratón moruno. Este sistema ya implementado con éxito en el Imperial College de Londres y en la Universidad de Oxford, permitirá conocer los efectos del cambio climático sobre las tasas metabólicas de estos roedores, así como efectos en sus áreas de campeo y densidad. Dado el papel de los roedores como dispersores de bellotas y presas de múltiples depredadores, el estudio permitirá comprender los cambios la estructura del bosque mediterráneo y en la cadena alimenticia del ecosistema. Este trabajo científico dirigido por Aurelio Malo es uno de los que el Departamento de Ciencias de la Vida de la Universidad de Alcalá lleva a cabo desde hace más de un año en el bosque de Valdenazar con la autorización expresa del Ayuntamiento de Yebes, un uso que está contemplado en la Ordenanza que protege y regula este paraje.