Cerca de 200.000 ciudadanos residen en Castilla-La Mancha pero siguen censados en Madrid. Una ‘población flotante’ que se localiza fundamentalmente en las provincias de Toledo y Guadalajara y, con especial incidencia, en las comarcas de La Sagra y la Mesa de Ocaña y en el llamado Corredor del Henares. Un ‘caladero’ de votos que no ha pasado desapercibido en esta atípica campaña electoral a la Asamblea de Madrid. El cierre perimetral no ha podido con las carpas de los partidos.  

El PP de Paco Núñez ha sido, sin duda, el más entusiasta en esta tarea, desde antes incluso de que comenzara la carrera electoral propiamente dicha. Esta apuesta ‘popular’ por Madrid se ve desde la misma organización de la campaña, en manos de la secretaria general del partido, Carolina Agudo, que se ha encargado directamente de coordinar los diferentes actos organizados en buena parte de la provincia de Toledo y en la zona de influencia ‘madrileña’ de Guadalajara. 

En total, el PP habría instalado más de medio centenar de mesas informativas en la región y dicen que las han llenado. «Isabel Díaz Ayuso es casi un fenómeno fan», «nos están quitando de las manos las pulseras con el eslogan democracia o libertad», apuntan fuentes del partido.

Madrid pone urnas en Castilla-La ManchaPero, ¿por qué hacer campaña en Castilla-La Mancha para unas elecciones a la Comunidad de Madrid? El PP lo tiene claro, «lo que pasa en Madrid nos afecta muy directamente a Castilla-La Mancha». Es más, «algunas zonas como Guadalajara capital, miran directamente a Madrid».

Además, «nuestro presidente, Paco Núñez, es muy cercano a Isabel», explican. Cercanía que también comparten en cuestión de programa, especialmente en materias como la rebaja de impuestos. «Creemos en el proyecto de Madrid y lo queremos también para Castilla-La Mancha».  

Ciudadanos también ha hecho campaña en Castilla-La Mancha, instalando carpas en municipios de frontera como Illescas, Yeles, Carranque, Seseña u Ontígola, así como en varios puntos del llamado Corredor del Henares. Zonas donde «nos importa mucho lo que pasa en Madrid».

Y es que, además de esta ‘población flotante’ que no se termina de empadronar en Castilla-La Mancha, «están los miles de trabajadores y estudiantes que todos los días traspasan la fronteras administrativas entre Madrid y la región», explica a la Tribuna el portavoz de Ciudadanos en las Cortes, David Muñoz.

Este es precisamente el leit motiv del último ‘empujón’ de campaña lanzado por Ciudadanos este fin de semana en las redes sociales, con un vídeo ‘personalizado’ por municipios, pero con un mensaje común: «Cada día cientos de jóvenes se desplazan a Madrid para estudiar o trabajar. Madrid también es de todos ellos». 

En este sentido, Muñoz comparte en parte la reflexión ‘popular’ en torno al porqué hacer campaña en Castilla-La Mancha de unas elecciones a priori ajena. Como asegura, lo que pasa en Madrid «también nos afecta mucho en Castilla-La Mancha». «El cómo se esté gestionando allí, nos termina repercutiendo aquí». 

Pero, además, en el caso de Ciudadanos está el hecho de que la formación ‘naranja’ se la juega en Madrid. «Nos preocupa que el ambiente polarizado y el ruido político se traslade aquí», en un intento de hacer desaparecer «el centro del escenario», apunta Muñoz.   

El PSOE, en cambio, ha optado por lo contrario. Su mensaje es tajante: Castilla-La Mancha no es Madrid. 

 «No hemos intervenido en la campaña del 4-M, como tampoco lo hemos hecho en otras ocasiones en elecciones de regiones vecinas como pueden ser Andalucía o Extremadura», apuntan fuentes socialistas consultadas. «Entendemos que Castilla-La Mancha es una región autónoma, que por ejemplo Illescas no es un barrio de Madrid, sino que es un municipio muy importante de la provincia de Toledo, como tampoco Cuenca o Albacete caben dentro de la M-30». 

En este sentido, desde el PSOE no se duda en criticar la fijación del PP regional con Madrid, que les ha llevado incluso a «incumplir el cierre perimetral para ir a mítines de Isabel Díaz Ayuso y hacer campaña en Madrid».

«Castilla-La Mancha tiene una identidad propia y lo que ha hecho el PSOE es seguir trabajando por nuestra tierra, la recta final que nos interesa no es la del 4-M sino la de terminar con la pandemia y conseguir la recuperación social y económica de nuestra tierra». Además, «nos alegramos de no estar en medio de una campaña que ha entrado en un nivel de crispación que nada se parece con la situación que vivimos en Castilla-La Mancha. Si por algo se caracteriza nuestra región es por ser ejemplo de moderación, de estabilidad, de acuerdo y de trabajo, trabajo y trabajo. Se ha puesto de manifiesto por ejemplo con el plan de empleo firmado con las cinco diputaciones o con las ayudas a pymes y autónomos, somos la comunidad que más dinero destina a este fin», insisten desde el partido de García-Page.

En definitiva, tres modelos diferentes de ver una campaña que mañana martes tienen una cita -o no- en Madrid. Ser verá.