En Tarifa ocurre lo mismo que en Las Vegas: los detalles quedan siempre en el recuerdo silencioso. Al grano, pues. En el sur del sur, en el punto de Europa más próximo a África, nace Comandante Twin y la primera vez es difícil de olvidar. Nunca es la faena cumbre y su estreno en aquel garito que se llama Bearhouse tampoco lo fue. «La gente se lo pasó en grande y eso que el concierto no salió bien. De vuelta a Madrid, comentando la jugada en el coche, nos dijimos: ¿por qué no seguimos?». Con Edu Santos (Madrid, 1984) y con Guille y Pablo -dos gemelos muy vinculados a Fontanar a los que conoció por un amigo en común-, nace el grupo al que bautizaron el mismo día de su primer acústico. «Nos llamó la dueña del local y nos preguntó por el nombre para poner los carteles del concierto. Probamos con varias combinaciones, siempre jugando con la palabra gemelo en inglés, y nos quedamos con Comandante Twin».
De aquello han pasado solo seis años y el viernes 25 de junio tocan en La Riviera, una de las salas con más prestigio del panorama musical español. ¿Y entremedias qué? Comandante Twin se hizo más grande con la llegada los leoneses Nico y Humber Iglesias y con Ophir Kadosh a la batería. Edu se encarga de componer la mayoría de las canciones, con algunas letras escritas cuando era un adolescente. «Maxisingle, uno de los temas incluido en el disco 1984, lo escribí cuando tenía 14 años». Porque a Edu siempre le atrapó la música de cualquier registro. «Primero te empapas de la música que escuchan tus padres. Sabina, Serrat, Bob Dylan, Bruce Springsteen… Luego con mi hermano empecé a escuchar a Nirvana, Dire Straits, Oasis, Kings of Leon y Coldplay. El año que pasé estudiando en EEUU me enganché a Foo Fighters y de casa a Leiva, Supersubmarina, Los Piratas, Izal, Viva Suecia…».
Llegó su primer concierto en Madrid en la sala Costelo y vendieron 150 entradas siendo unos desconocidos y sin promoción. Tocaron después en el Hard Rock y llenaron en dos pases seguidos. En Moby Dick, lo mismo. Y en la sala El Sol. Y en la Joy Eslava. Se han ido estrenando en los festivales más punteros de España y han tocado en Bilbao, Barcelona, Valencia, Granada, Sevilla y Vigo. Hay que hacer parada especial en el Sonorama Ribera. «En 2019 fuimos grupo sorpresa después de tocar el año anterior. En las horas previas, la gente especulaba si sería Leiva, Izal o Supersubmarina, que habían vuelto. Cuando la megafonía anunció que se trataba de Comandante Twin intuimos la decepción. Había 12.000 personas esperándonos, salimos a comernos el escenario y lo reventamos. Cuando acabó, lloré como un niño». A su favor, juega la complicidad que les ha unido desde el principio y la seguridad con la que pisan el escenario. «En los directos ganamos mucho porque lo damos todo. Conseguimos una unión que nos hace diferentes».
A Comandante Twin les lleva RLM Management, una de las empresas líderes del sector de la música que estuvo con Alejandro Sanz, Miguel Bosé, Mecano (después con Ana Torroja) y que sigue trabajando con Raphael o con Rozalén. Después de 1984 y Hoy, su último disco, preparan un EP con temas como Alerta Nuclear, Sangrar a Borbotones y Huracán que les consolidan como banda. «Se nos ponen los pelos de punta. Son canciones que enganchan a la perfección con nuestro perfil».
Edu tiene un pasado futbolero que le unió con Guadalajara para siempre. Tras pasar por el Club Deportivo Avance y la RSD Alcalá, creció jugando durante cuatro temporadas con el Marchamalo. «Mi objetivo era jugar en Tercera y lo conseguí. Como tocar en la Riviera». Ha compuesto el himno del Sonorama Ribera con una letra que refleja bien las ganas de recuperar lo perdido después de todo el tiempo que nos han robado: «Quiero volver a descansar en tu ribera». También está detrás del himno del Hogar Alcarreño, flamante equipo de Tercera. Siempre con optimismo. Siempre pensando en hacer algo grande entre todos con las cosas muy claras. A sus órdenes, mi comandante.