Retos más allá del coronavirus

EFE
-

La OMS arranca hoy su asamblea anual en la que abordará temas como la cobertura universal o las enfermedades crónicas, y debatirá sobre un posible tratado en caso de futuras pandemias

El déficit de trabajadores de la salud será otra de las cuestiones a tratar. - Foto: Gustavo Amador

La Organización Mundial de la Salud (OMS) da hoy el pistoletazo de salida a la 74 edición de su asamblea anual, que tendrá una cargada agenda centrada en la pandemia, pero que no olvida temas críticos de la salud pública, como los precios de las medicinas y el avance de las enfermedades crónicas.

La cobertura sanitaria universal es uno de los grandes objetivos que la OMS impulsa desde hace años, en concordancia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 de la ONU, pero el retraso es obvio y el coronavirus puso en evidencia la forma en que esto aumenta la vulnerabilidad de los países.

Otro tema central de la agenda de la asamblea, que por segundo año será virtual, serán las enfermedades no transmisibles, que en tiempos normales representan el 70 por ciento de la carga de morbilidad a nivel mundial, con millones de enfermos que sufrieron la interrupción de sus tratamientos a causa de la emergencia sanitaria.

Desde hoy y hasta el próximo 1 de junio, las autoridades y expertos de salud de los 194 Estados miembro de la OMS también se volcarán en el tema del impacto que ha tenido la pandemia en la salud mental de la población y, en particular, de la juventud.

El déficit de 80 millones de trabajadores sanitarios es otro gran motivo de preocupación y los países negocian los términos de una resolución que abordará esta problemática y sus posibles soluciones, para someterla a la aprobación de la asamblea.

En cuanto a las enfermedades crónicas se prevé una resolución sobre la diabetes y, del lado de las patologías infecciosas, se prepara otra sobre la tuberculosis, una de las patologías en la que el problema de la resistencia a los antibióticos se ha vuelto más grave.

No obstante, la preocupación por la actual crisis sanitaria continúa muy presente y la organización no dejará de lado el tema. En el ámbito exclusivo de la COVID-19, la cuestión más importante sobre la cual la asamblea deberá decidir es si abre o no negociaciones para redactar un tratado internacional para enfrentar futuras pandemias.

El asesor legal principal de la OMS, Steve Solomon, explicó que en caso de que la propuesta salga adelante no reemplazará al actual Reglamento Sanitario Internacional, sino que lo complementará.

La discusión sobre un eventual tratado no hará más que empezar, pero ya hay ideas de las que podrían ser sus elementos centrales, entre ellas la creación de mecanismos de cumplimiento y vigilancia ante el surgimiento de patologías desconocidas, con mayores poderes para la institución. Asimismo, podrían incorporarse reglas más claras para compartir muestras de los agentes patógenos, así como tratamientos, diagnósticos o vacunas, y evitar que se repita, una vez más, el escándalo que representa la desigual distribución de las vacunas.

Sería apenas la segunda vez desde 1948, cuando la Constitución de la OMS entró en vigor, que la asamblea utiliza el poder que tiene de elaborar tratados internacionales.

 

Temas fuera de la agenda

En cambio, no figura en la agenda de la asamblea ninguna cuestión referida al grupo científico que ha investigado el origen del coronavirus, pero cuyas conclusiones dejaron abiertas varias posibilidades y muchos consideraron poco satisfactorias. Una portavoz de la OMS ya adelantó que esto no significa que el tema no será discutido, ya que los países pueden plantear un debate al respecto en el segmento dedicado a asuntos de emergencia.

Algunos lamentan que tampoco se haya incluido en la agenda la situación que genera la patología del «COVID-largo», referida a los síntomas persistentes más allá de las cuatro semanas después de que una persona ha sido declarada libre del virus.