El Juzgado de Primera Instancia número 1 de A Coruña ha concedido a la familia Franco el plazo de un mes para que retiren "las cosas, bienes u objetos" que hay en el interior del Pazo de Meirás, tras la solicitud que presentó con este fin el pasado lunes, ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Galicia.

Para ello, la letrada de la Administración de Justicia, en la diligencia de ordenación, requiere al Estado para que permita el acceso al pazo de los profesionales que designe la familia Franco para poder efectuar la retirada de los bienes.

La Audiencia Provincial de A Coruña revocó el auto de este juzgado que ordenaba depositar a favor del Estado todos los muebles y elementos accesorios del inmueble, y condenó a la Administración a indemnizar a los Franco por los daños ocasionados.

Según los magistrados de la Audiencia, en la ejecución provisional de la sentencia que otorga la titularidad del pazo al Estado "no procede la discusión sobre a quién le pertenece el mobiliario, pues la Administración no lo reclamó en su demanda inicial", sino únicamente la finca.

No obstante, entre el mobiliario que podrán llevarse no figura aquello que eventualmente se encuentren en el pazo por haber sido colocado por el Estado tras haber tomado posesión del inmueble, según la misma diligencia, contra la que cabe presentar recurso de reposición.

Asimismo, y respecto a la petición de la parte demandada de que se declare no existente, a todos los efectos, el inventario sobre los bienes del pazo, así como de que se prohíba su divulgación, el juzgado otorga a las partes un plazo de diez días para indicar si están conformes con esta solicitud o presentan alegaciones.

El pasado noviembre, dos meses después de la sentencia que otorgaba el inmueble al Estado, se inició el inventario del Pazo de Meirás, que contabiliza un total de 697 bienes, de los que 616 están en el interior y 81 en el exterior.

Entre ellos figuran las estatuas de Abraham e Isaac, esculturas y cuadros de la escritora Emilia Pardo Bazán pero también retratos de Francisco Franco y de Carmen Polo, así como varios bienes muebles que tienen su origen en las Colecciones Reales Españolas y su titularidad corresponde a Patrimonio Nacional, según el documento.