En Castilla-La Mancha hay más conejos que personas. Muchos más. Al año se capturan dos millones de ejemplares, que es el mismo número de habitantes que tiene la región. El dato lo dio el director general de Medio Natural y Biodiversidad, Félix Romero, que esta tarde compareció en una Comisión en las Cortes regionales para hablar de la sobrepoblación de este animal. Calcula que al año provocan daños en una superficie entre las 10.000 y las 18.000 hectáreas de cultivos. Aunque pueda parecer un porcentaje pequeño en comparación con los 3,5 millones de hectáreas agrarias, Romero no quiso minimizar lo que está ocurriendo «porque a quien le toca, le ha tocado la pedrea».
Romero llegó a la Dirección General hace menos de dos años y reconoce que cuando se incorporó fue algo que le llamó la atención. «Me sorprendió la intensidad en la que se había trabajado para dar solución al problema de las sobreabundancia de conejos», contó. Durante varios años se lleva declarando la comarca de emergencia cinegética, algo que ya afecta a casi 300 municipios. Aclaró que «no se refiere a la necesidad de cazar en todo el término, sino a facilitar instrumentos para reducir la población de conejos». Y eso abre las puertas a propietarios de terrenos cinegéticos o agrícolas para utilizar distintos métodos de caza, con escopeta, con perro o con hurón.
Otra de las medidas que ha puesto la Junta encima de la mesa son ayudas para que los agricultores instalen mallas o protectores para sus cultivos. Romero reconoció que sobró crédito. Se han resuelto 67 solicitudes por 33.500 euros, por lo que han sobrado 170.000. «No tantos agricultores como esperábamos decidieron acogerse», admitió. Comentó que quizá no lo ven como una medida tan importante o que encuentran el proceso muy burocrático, así que estudiarán como simplificarlo. «Las medidas han estado y no han sido tan bien recibidas como todos hubiésemos esperado», reconoció, «sigue habiendo crédito y estamos en disposición de volver a ponerlo para los agricultores».
Romero también quiso recordar que el problema de la sobrepoblación de conejos no es única de Castilla-La Mancha ni de España. Se debe a la «estrategia de reproducción oportunista», es decir, que es una especie con un número elevado de partos y con camadas grandes. El director general contó que cuando se introdujeron en Australia, donde encima no hay depredadores, se extendieron rápidamente. Luego para controlar la población se utilizaron incluso patógenos. Señaló que la extensión de la mixomatosis puede tener este origen.