Alejandro Ruiz

EL REPLICANTE

Alejandro Ruiz


La nana arrugada

09/09/2021

Con la extraña sensación de vivir un 7 de septiembre sin la apertura de la Feria, Albacete afronta un año más la tremenda pérdida económica y emocional que significa la obligada abstinencia festiva del tradicional jolgorio identitario local, que la Covid-19 nos vuelve a imponer.
A modo de tratamiento paliativo, el Ayuntamiento ha acertado con la organización de un amplio programa cultural con representaciones teatrales, conciertos musicales y eventos deportivos. Ahí encuadro, precisamente, el magnífico concierto que Ara Malikian nos ofreció en la noche del mismo día 7. Malikian, virtuoso del violín, libanés de ascendencia armenia, con nacionalidad española y residente en España, sorprende con un espectáculo insertado en la gira que está realizando para presentar su disco ‘Petit Garage’, compuesto durante la pandemia, que recoge perfectamente y traslada al público el sentimiento de desasosiego que todos hemos vivido por culpa del maldito coronavirus.
Sorprende Malikian, también, por la presentación que hace de cada uno de los temas que seguidamente va a interpretar, con una serie de pequeños y graciosos monólogos explicativos que amenizan más, si cabe, su extraordinario espectáculo. Como cuando explica, por ejemplo, el título de su tema ‘El calamar robótico’, dedicado a su hijo Kairo; o el que dedica a sus hermanas, contando con sorna la anécdota del enfrentamiento entre Taline y Nanig, reflejando luego con el violín dos partes claramente diferenciadas que representan la disputa entre las dos hermanas.
También es obligatorio hablar de los acompañantes de Ara Malikian, bajo, contrabajo, batería y guitarra y, sobre todo, del pianista cubano Iván ‘Melón’ Lewis, que complementa al violín con gran maestría y virtuosismo, dando mayor ritmo, calidad y vistosidad al concierto.
Pero quiero detenerme especialmente en el tema de ‘La nana arrugada’, que Ara Malikian interpretó con especial sentimiento y fuerza y que, según explica él mismo, ‘La nana arrugada’ la compuso pensando y dedicando a todos los ancianos o personas vulnerables que han tenido que despedirse durante la pandemia en soledad sin la caricia de familiares compañeros o amigos. Para aquellos que murieron en silencio y solos.
Nos trajo así el recuerdo y el homenaje a esos miles de ancianos que murieron sin un adiós, sin despedida, sin ceremonias. Esa generación de hombres y mujeres que pertenecían a la generación de la posguerra, a los ahorradores de la década de los sesenta, que entraron con pie firme en el 78 y que ahora comparten grupo en WhatsApp con sus nietos. Y con los acordes melodiosos, dulces y nostálgicos de esta hermosa nana, Malikian nos llena a todos de fuerza para continuar, para levantar la cabeza y para seguir adelante con el bello recuerdo de las historias personales de cada uno de los fallecidos, de todos los que se fueron y que por siempre permanecerán en nuestro recuerdo.