José Manuel Patón

LA PLUMA CONTRA LA ESPADA

José Manuel Patón


Los impuestos, el paro y la teta

12/05/2021

Los políticos son unos listillos, porque saben que en 4 o 6 años se van del congreso, de las consejerías o de las listas de su partido, y ese plazo es muy corto para ganar dinero. Hay que ordeñar rápido.
Por eso los políticos para cumplir con Bruselas o bajar el déficit del Estado nunca proponen rebajarse los sueldos, despedir a sus ‘asesores’, o quitarse los choferes, los coches oficiales, los viajes en primera y las tarjetas de crédito a costa de empresas semi públicas como pasó en Bankia.
Los políticos cuando necesitan dinero no se aprietan el cinturón como las familias normales, simplemente suben los impuestos.
Los ingenuos votantes, muchos de ellos trabajadores, pensionistas o parados, piensan que no va con ellos el problema de subir impuestos, y cuando sale una noticia así, muchos piensan que solo afectarán a los ricos. Pues no. Las subidas de impuestos generan más paro y menos recaudación, porque la gente se va a otros países, o se desmoraliza, o se arruina. Además Montoro puso en marcha una hambrienta inspección de hacienda que los políticos usan de guardia pretoriana para recaudar más y poder gastar más. Buena prueba de ello tenemos en que cuando Aznar bajó los impuestos, ¡y eso que era Inspector de hacienda!, sacó a España de la ruina porque atrajo más capital, hubo más negocio y bajó el paro a unos números increíbles.
Zapatero subió los impuestos, y con ellos subió el paro y la desconfianza de los empresarios, y al final, rota su moral por su estupidez, tuvo que recurrir a proteger a los ‘emprendedores’, que no eran ni más ni menos que los empresarios de toda la vida pero que su dialéctica estalinista le impedía llamar por su nombre: empresarios. Zapatero se cargó España, y no solo con la subida de impuestos, sino que impidió que la mitad de España, a la que le sobra sol para producir más frutas y verduras pudiera llevar a efecto el trasvase del Ebro, y todo por lamerle el c… a los catalanes que entonces gobernaban Cataluña, a los que también, siguiendo el iter de su supina estupidez, les dijo que iba a aprobar un estatuto de patrias y aflicciones. Hoy se ha ido a lamerle el c… a los venezolanos, a ver que les saca.
Lo que yo digo no es teoría filosófica semántica o humo, es simplemente comprobable con la realidad. Con Felipe González pagábamos el 57% del IRPF, y tenía el 25,4 de paro; Aznar lo bajó a un máximo del 43, y teníamos un 11% de paro. Cualquiera puede comprobarlo, punto arriba o punto abajo.
De hecho, Portugal e Irlanda que eran los países más pobres de Europa hoy nadan en la abundancia por haber bajado los impuestos, y ser de los países que menos impuestos pagan en Europa.
Por tanto, señores, ni ricos ni pobres, ni parados ni trabajadores, nunca voten a ningún político que diga que va a subir los impuestos, en vez de prometer que va a bajar los gastos. Lo último igual no lo cumplen, como tantas cosas, pero lo primero siempre, porque para ellos somos como la teta de la vaca.