Existe un orden, por antigüedad, establecido para que las peñas de Guadalajara lancen el cohete del chupinazo cada lunes de Ferias. Para muchos peñistas, este es uno de los momentos más emocionantes, más felices y más esperados del mes de septiembre, razones suficientes para que sea un orgullo para los encargados de prender la mecha.

En la peña Fugitivos llevan dos años para vivir este momento. Debía haber tomado el testigo en 2020 de manos de la peña La Agüela, que fue la protagonista en 2019, pero la crisis sanitaria ha impedido la celebración de las dos últimas dos ediciones de las Ferias y Fiestas de Guadalajara.

"Llevamos tiempo esperando porque nos tocaba hace dos años. Con la pandemia y lo que hemos vivido estos años, por lo menos ahora llega el final y el momento de disfrutar. Por fin llega", declara Javier Tejero, presidente de la Peña Fugitivos.

Javier será una de las personas que subirá al balcón del despacho del alcalde del Ayuntamiento de Guadalajara para pronunciar unas breves palabras y, poco después, lanzar el chupinazo. Es consciente de que es un momento en el que no se escucha demasiado desde la calle y por eso no le da demasiada importancia a lo que se vaya a decir: "Lo tenemos todo en el aire. Va a ser algo normal. En ese momento, diremos lo que sea porque es un momento de fiesta. No es un pregón como tal. No va a ser nada del otro mundo, algo normal y corriente", asegura el presidente de Fugitivos.

Este año, como ocurre en muchas peñas, Fugitivos, que se fundó en el año 2000, ha contado con un aluvión de personas que querían apuntarse. Por eso, han decidido poner un límite, para continuar siendo una peña en la que se congregan grupos de amigos: "Hay mucha más gente que quiere apuntarse y por eso vamos a poner límite de 150 personas porque estamos al borde. Queremos seguir siendo como siempre, como todos los años. Lo que hemos notado es que hay gente muy joven, que iba a cumplir los 18 años en ese 2020 y que estos dos años no ha podido hacer y que ahora quieren hacer peña. Hay como tres generaciones que están ahí buscando peñas", asegura Javier Tejero.

La peña Fugitivos estará situada en San Roque, manteniendo la ubicación que ha tenido en los últimos años. Eso sí, este año estará mucho más arropada por otros peñistas, una decisión que han recibido bien desde este colectivo: "Va a estar todo mucho más concurrido. Se va a notar el ambiente y que todo va a estar más unido. Para la gente, que esté todo unido, va a ser mejor. Tienes acceso todo en un mismo momento y no tienes que ir de punta a punta", mantiene el presidente.