Este viernes se debatió en el pleno de Azuqueca de Henares una moción del Grupo Municipal del Partido Popular para revocar el decreto de la Alcaldía de venta de una parcela municipal para la acogida de refugiados, propuesta que no prosperó al contar el Gobierno municipal con mayoría absoluta.

Así, con 11 votos en contra (PSOE) y ocho a favor (IU, PP, Cs y  la concejala no adscrita) fue rechazada la moción de los populares, pese a que toda la oposición apoyó que se revocara, de momento, la enajenación de suelo por un valor de 1,7 millones de euros al Ministerio de Migraciones y Seguridad Social.

Los grupos de la oposición coincidieron en que tomar esta decisión por decreto no es la forma adecuada. Una moción en la que también se solicitaba la convocatoria de una mesa de convivencia en la que estuvieran representados todos los partidos políticos, empresarios, ONG y habitantes de Azuqueca, al entender que esta decisión va a afectar también a los futuros vecinos de la zona de ampliación.

El portavoz del Grupo Popular, Manuel Corral, cree que el Ayuntamiento actuó con «oscurantismo» y sin buscar un consenso de todos, como hubiera sido la forma idónea. Sin embargo, el alcalde, José Luis Blanco, en declaraciones a este medio, remarca que la la venta de este terreno para un Centro de Acogida de Refugiados es fruto de un proceso que se inició hace un año, a raíz de la guerra en Ucrania y por unanimidad de todos los grupos «en un acuerdo de ciudad». Dicho acuerdo recogía que Azuqueca se ponía a disposición del Gobierno de España para facilitar el derecho de asilo a los refugiados que salen de su país por situaciones diversas. 

Blanco justifica su rechazo a la moción como una decisión que entra dentro de las políticas del Gobierno municipal: «estoy haciendo como alcalde lo que me han pedido todos los grupos». 

Asegura que este centro «es beneficioso para la ciudad y no causará problemas de convivencia sino que, por el contrario,  generará ingresos». El primero será el ingreso por la venta la parcela al Ministerio; también se crearán entre 20 y 30 empleos y habrá más ventas en el comercio. Además, quiere que el mismo sea un centro de referencia de integración y convivencia a través del deporte. «En ningún momento he ocultado nada y, como alcalde, no voy a dejar de trabajar por la convivencia», precisa tras anunciar la posible ubicación en otra parcela colindante a esta del futuro edificio del Sepecam.  

Desde el Grupo Popular inciden en que estos terrenos podrían destinarse a otros fines como la construcción de viviendas para jóvenes o de una residencia para mayores, sin descartar  dicho centro, «y no por eso somos racistas ni indecentes, solo queremos que las cosas se hagan bien», concluye Corral.