Cierra al tráfico el carril de bajada de Julián Besteiro

Belén Monge Ranz
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Los cortes, que se acometen para sustituir el carril bici actual por un ciclocarril y reparar aceras, se prolongarán una semana, aproximadamente

Cierra al tráfico el carril de bajada de Julián Besteiro - Foto: Lara Ranz

A partir del próximo 11 de enero y hasta aproximadamente el 18 de este mes quedará cortado al tráfico rodado el carril de bajada de la calle Julián Besteiro en el tramo que va desde la calle Batalla de Villaviciosa con la Glorieta de Buenafuente, con el fin de eliminar el tramo de algo más de un kilómetro de carril bici actual, donde se colocará suelo deslizante, a la par que se creará un ciclocarril.

Estas obras están enmarcadas dentro de la amplia actuación que se está llevando a cabo en esta zona de Guadalajara, con una inversión estimada de 700.000 euros para actuar en unos 20.000 metros cuadrados de vía pública entre calzada y aceras.

La primera fase está concluida y ha consistido en la reparación de puntos peligrosos de aceras con material antideslizante, aunque es un hecho constatable que hay tramos ahora donde el color de las mismas es multicolor. 

En cuanto al corte del carril bajada que se realizará a partir del próximo día 11 y durante un periodo aproximado de una semana, se dejará solo abierto el sentido subida en el citado tramo, hacia la Avenida del Ejército, desviándose a los vehículos de forma conveniente en sentido bajada.

Estas obras también afectarán a la circulación de los autobuses urbanos. Así, la línea circular que pasa por Julián Besteiro tendrá itinerarios alternativos de los que, según ha indicado el teniente de alcalde y concejal de Obras, Rafael Pérez Borda, se informará en fechas próximas. "Trataremos que se produzcan las menores molestias posibles", señala el edil, insistiendo en que eso es lo que se ha tratado de conseguir manteniendo uno de los carriles abiertos. 

La diferencia entre un carril bici y un ciclocarril es que este segundo va por la calzada y su creación va a conllevar que la circulación en este tramo de prioridad a ciclistas, limitándose para todos los vehículos a 30 kilómetros por hora. 

Según Pérez Borda, el actual carril bici estaba generando constantes incidentes entre peatones y ciclistas, y más con la creciente presencia de terrazas desde la llegada de la pandemia. 

Para informar de ello también se van a instalará una señalización en la que se indicará por donde continúa el carril bici una vez que se haya eliminado el del citado tramo, que borderará el archivo provincial. 

El primer teniente de alcalde y concejal de Urbanismo citó este miércoles a los medios de comunicación en la calle Julián Besteiro para mostrar algunos de los trabajos realizados ya en esta vía y vías cercanas dentro de la primera fase iniciada el pasado mes de noviembre. Se ha mejorado la accesibilidad y ampliado aceras en mal estado de Julián Besteiro y calles como Juan Ramón Jiménez y Jorge Luis Borges, donde se han colocado baldosas antideslizantes; se ha actuado ya sobre los accesos a los pasos de peatones, los accesos a las paradas de autobús, y se han eliminado los escalones y creado rampas para lograr unas aceras accesibles.

"Eran unas obras muy necesarias y reclamadas" en una zona con una gran confluencia de vehículos, alrededor de 3000 vehículos al día, señala el edil.

En esta segunda fase, además de la eliminación del carril bici, está prevista la impermeabilización y pavimentación sobre el puente del río Henares, "que ya lo necesita porque llevaba sin mantenimiento hace años", abunda el concejal, tareas que en una tercera fase sumarán actuaciones en el tramo que va desde la Glorieta del Centro de Salud con Los Manantiales a la confluencia con la calle Buenafuente hacia Francisco Aritio, donde también se dejará la circulación en uno de los carriles y se señaliza según se vaya actuando.

Otra actuación prevista es la mejora de los aparcamientos de las calles perpendiculares a Julián Besteiro: Juan Ramón Jiménez, Vicente Aleixandre y Jorge Luis Borges.

Se trata de una "gran actuación integral", que arrancó el pasado noviembre y que tiene una duración de cuatro meses, con lo cual, a finales de febrero debería estar toda la obra terminada", reafirma Pérez Borda.

El primer teniente de alcalde reconoce que les hubiera gustado poder acometer una actuación integral en las aceras en vez de actuaciones puntuales pero que el coste se hubise multiplicado por dos o tres.