La localidad guadalajareña de Pozo de Guadalajara contará a partir de septiembre de 2023 con una central solar fotovoltaica con capacidad para producir 88 megavatios, que comportará para el municipio no solo unos importantes beneficios económicos sino la creación de puestos de trabajo, entre 200 y 300 durante su construcción y entre seis y ocho empleos de forma permanente.

El proyecto ha sido presentado este miércoles por parte de Pablo Giménez, de Q Energy y el alcalde de Pozo de Guadalajara, Javier Hurtado, una apuesta que para el regidor es también supone un reto hacia las energías limpias, hacia el futuro y hacia una nueva forma de crecimiento en el municipio.

Y con el fin de que la empresa se integre mejor en el municipio y que el impacto sea más positivo, esta construcción contempla también la firma de un acuerdo tripartito con el Ayuntamiento de Pozo de Guadalajara y el Club Deportivo de Fútbol Sala de esta localidad, que conllevará la donación por parte de la compañía de 10.000 euros anuales para la promoción de deporte, dinero que se va a destinar al pago de las fichas federativas de los niños que juegan en este club.

Para ejecutar este proyecto, una planta pensada para producir la energía equivalente a unos 55.000 hogares, se ha alcanzado también un acuerdo de alquileres a largo plazo o compra de las parcelas con los propietarios de las tierras, alquileres que irán entre los 1500 y los 1700 euros por hectárea a año, con un plazo de unos 30 años previstos.

En todo caso, tanto el alcalde como el representante de la empresa han asegurado que se ha tenido en cuenta en todo momento el evitar el impacto visual de la misma asegurando que apenas se verá por el lugar en el que se ubica.

Las obras arrancarán en septiembre de 2022 con idea de que la instalación pueda entrar en funcionamiento y producir energía para 2023.

Por lo que respecta al impacto económico en el municipio, según su regidor, para el Ayuntamiento va a ser "brutal" ya que se va a pasar de 800.000 euros de presupuesto a más de 1,3 millones. Q Energy pagará en impuestos más de 500.000 por su actividad, al margen de los indirectos.

"Prácticamente duplicamos el presupuesto", ha concluido por su parte el alcalde, reconociendo la importancia de este proyecto a la hora de mejorar los servicios y asegurando también en respuesta a los posibles detractores de este tipo de instalaciones en tierras agrícolas, que "no va a desaparecer ningún agricultor".