Aike Guadalajara recurrió en el Tribunal Contencioso-Administrativo el proyecto de rehabilitación de la pasarela del Barranco del Alamín, cuyos trabajos comenzaron el pasado martes. Según argumentó hoy el concejal del grupo municipalista, Jorge Riendas, dicho proyecto no cumple con la normativa vigente en materia de accesibilidad, tal y como advirtieron hace unos meses desde la formación municipalista. Para demostrarlo, Riendas dio a conocer el informe elaborado por los técnicos del CAMF de Guadalajara, en el que se pone de manifiesto «la importancia de zonas de descanso indispensables, sobre todo, para los usuarios de sillas de ruedas y también para los usuarios que precisan asistente personal para su desplazamiento en este tipo de sillas ya que las distancias en pendiente continua requieren de un esfuerzo físico importante».
En concreto, el edil de Aike explicó que el proyecto planteado desde el Consistorio capitalino, que fue elaborado por un gabinete técnico externo y se está ejecutando en este momento, no respeta ni el Código de Accesibilidad de Castilla-La Mancha, ni la Orden de la Vivienda 561/2010 de 1 de febrero ni la Orden Ministerial posterior de 2021, donde se especifica que para rampas con tramos de hasta tres metros de longitud y con una pendiente mayor del 10 por ciento, como es este caso, es obligatorio la existencia de zonas de descanso de 1,5 metros. «Desde Aike ya insistimos en este tema, en que la inclinación de estas rampas, que algunas tienen más de 30 metros sin ningún descanso, no cumplen la normativa. Y no es sólo que no cumplan la normativa, sino que si queremos tener un sello de Guadalajara Diversa y tener en cuenta a esas personas que tienen una movilidad reducida, ya sea de manera continua o temporal, hay que poner espacios de descanso en esta rampa», reclamó Jorge Riendas. ««Presentamos este informe en el Ayuntamiento, avisamos y hemos presentado un recurso en el Contencioso Administrativo. El Ayuntamiento sabe que está en marcha, pero ha hecho caso omiso y la obra está en ejecución. El Ayuntamiento ha ido a las bravas», añadió.
Aparte del informe elaborado por los técnicos del CAMF, el edil de Aike adelantó que pronto contarán con otros dos más solicitados a la Delegación Provincial de Bienestar Social y al Centro de Referencia Estatal de Autonomía Personal y Ayudas Técnicas (Ceapat). «Nos consta que la Junta ya ha hablado con el Ayuntamiento para interesarse y solucionar el problema», aseguró Riendas. Además, el concejal de Aike comentó que los técnicos municipales informaron sobre este proyecto «y advirtieron que hay errores».
Al margen de la ausencia de zonas de descanso, otra problemática que, a juicio Aike, padecerá la pasarela del Alamín una vez rehabilitada será el material del suelo, ya que la madera será sustituida por rejillas metálicas de tramex (similares a las existentes en la Plaza Mayor). «Se ha demostrado que este tipo de rejillas generan problemas a muchas personas. Hay gente a la que provoca tensión o crisis y no pueden pasar. Es algo que también se debería haber tenido en cuenta», lamentó Riendas, quien consideró que una buena alternativa para paliar estas deficiencias hubiese sido la sustitución de la madera existente por otra nueva y la instalación de un ascensor como ya existe en multitud de ciudades que necesitan salvar obstáculos de este tipo.
Por último, la presidenta de Aike, Susana Martínez, recordó que esta obra supondrá casi medio millón de euros a las arcas municipales. «Se trata de una gran inversión para el Ayuntamiento y no se va a hacer bien, no lo entendemos», concluyó.