El Gobierno de Castilla-La Mancha recomienda a la vecina Comunidad de Madrid un ‘cierre de fronteras’ preventivo para evitar un nuevo repunte de contagios. «No podemos dejar que la Semana Santa sea una segunda Navidad», señala la portavoz de la Junta, Blanca Fernández.

Y es que, como insiste, «tenemos que ser tremendamente prudentes en la desescalada, cada fallo se traduce en muertos». «Hay que hacer un último esfuerzo».

Fernández defiende la decisión de Castilla-La Mancha de mantener unas semanas el cierre perimetral, pese a las críticas recibidas desde el PP. «El perimetraje es eficaz y la inmensa mayoría de los ciudadanos lo ha cumplido». «Las cifras son muy esperanzadoras, nuestra incidencia está ahora 72 puntos por debajo de la media nacional, pero no nos podemos relajar», advierte.

En este punto, la portavoz de la Junta pide «coherencia» a la oposición ‘popular’ y se pregunta si con su negación de la validez del cierre de fronteras insinúa que «la Guardia Civil no está cumpliendo con su obligación» o que «la gente no cumple las normas». «No se puede estar recogiendo firmas en las calles en favor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y poner luego en cuestión su magnifica labor», señala. Además, insiste, «el cierre perimetral es eficaz y la inmensa mayoría lo ha cumplido».

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, incide también en este mensaje, mostrándose partidario de mantener el confinamiento perimetral en las diferentes autonomías de cara al periodo vacacional de Semana Santa. El objetivo:  «seguir poniéndole barreras al virus».

El presidente regional hace también un llamamiento a todos «a arrimar el hombro» en la lucha contra la pandemia y «no dar codazos». «Cuando hay una epidemia, hay que estar con el Gobierno de turno, aunque se equivoque».

Por ello, reclama «un mensaje único y que todo el mundo entienda el mensaje» respecto a la pandemia para evitar así «la confusión y el ruido».

«Todo el mundo sabe lo que nos tocaría volver a hacer si las cosas se complican», avisa. «En Castilla-La Mancha hay timón y cuando hay que tomar decisiones se toman, y las consecuencias son evidentes».

En relación a la noticia de que las infantas Elena y Cristina y el exdirector del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Félix Sanz Roldán se habrían vacunado contra el coronavirus en los Emiratos Árabes aprovechando un viaje para ver a su padre, Juan Carlos I, desde la Junta se opta por la prudencia y pide que sean los afectados quien confirmen el hecho y «den las explicaciones oportunas». No obstante, desde el Gobierno regional se insiste en la necesidad de «ser solidario y esperar el turno».