Carmen Tomás

LA COLUMNA

Carmen Tomás

Escritora y periodista en información económica


El Gobierno nos hace luz de gas

15/05/2022

El Gobierno aprobó el viernes el invento del tope del precio del gas. Pero, incomprensiblemente, lo hizo sin el visto bueno de Bruselas. Es decir, que lo publicó ayer el BOE, aunque no sabemos cuándo entrará en vigor. Hace mucho tiempo que nos tienen acostumbrados a una forma de gobernar difícil de seguir. El viernes superaron, de momento, cualquier expectativa. La rueda de prensa de la vicepresidenta del ramo fue rocambolesca y más o menos parecido el encuentro que posteriormente tuvieron los periodistas con un grupo de técnicos de la vicepresidencia. Fue tan surrealista todo que hoy no sabemos ni cuándo, ni cómo, ni quién va a pagar la diferencia que sin duda habrá entre el tope de 50 euros y el precio real del gas en los mercados. Nos tememos, como hemos venido intuyendo en estos casi dos meses, desde que Sánchez lograra lo de la "excepción ibérica", que lo acabaremos pagando todos los consumidores.

La realidad es que se ha aprobado el tope del gas, pero sin el visto bueno de Bruselas, que no se ha conformado con decir que aún faltaban muchos detalles técnicos, sino que ha exigido que se acabe con la tarifa PVPC, la que se marca con el coste diario y por horas y en la que, por cierto, están las personas vulnerables acogidas al bono social. Todo parece un despropósito. Y lo es. De hecho, la vicepresidenta Ribera y sus técnicos se han mostrado incapaces de ofrecer a los periodistas una fecha para la aprobación definitiva. Días o semanas, ha dicho Ribera. Es de justicia preguntarse, por tanto, por qué el Gobierno ha aprobado una medida que no sabe cuándo entrará en vigor. Lo que si se sabe es que a la orden ministerial que verá la luz cuando Bruselas de el ok definitivo, le van a llover las demandas de empresas e inversores y quizás el tope del gas jamás entre en vigor o cuando entre descubramos que cualquier parecido con lo que nos han estado vendiendo estos dos meses será pura coincidencia.

Veremos al final en qué queda este cacareado éxito de Sánchez y del que no están contando a los ciudadanos el final de la película. Puede, si al final se aprueba, que se acabe creando un déficit de tarifa que cuando menos lo esperemos aparezca en nuestros recibos. El sueño que nos han contado de que la factura de la luz se reduciría a la mitad puede acabar en pesadilla y de las peores.