El calendario ha querido que  este sea el fin de semana principal de las comidas y cenas de amigos o de empresa por Navidad. Las festividades de los días de la Constitución, la Inmaculada, así como de Nochebuena y Navidad que caen en sábado y domingo, hace que las reservas de los establecimientos hosteleros estén completas desde hace semanas para estas celebraciones.

«Lo estamos viviendo como una época muy buena de trabajo. La gente está intentando disfrutar lo que no se ha disfrutado estos años de atrás. Llevamos un par de semanas trabajando bien y la previsión de cara a las próximas semanas, ya de Navidad, es muy buena. Las reservas están en un punto bastante bueno. Quizá mejor del que estábamos el año pasado. Hay que recordar que, por estas fechas, todo iba muy bien también pero luego tuvimos la recaída famosa que nos hizo perder todas las reservas para el fin de semana principal», comenta el vicepresidente de la Federación de Hostelería y Turismo de Guadalajara y propietario Grupo Lino, Mario de Lucas, que recuerda la fuerte incidencia que tuvo la variante ómicron del coronavirus que arruinó a muchos las Navidades de 2021.

Este ambiente de alegría se deja notar también en los bares y locales de copas. «Desde antes de verano, no tenemos queja alguna y se nota que la gente tiene muchas ganas de salir. Con esa incertidumbre de qué va a pasar los próximos meses, y de cara a Navidad, volvemos a poner las mismas energías que teníamos prepandemia. Esperando las cenas y comidas, quedadas y vermús de Navidad. Esperemos que salga todo bien, la gente se divierta, tengamos trabajo y que vuelva a todo a la normalidad», declara Javier Rodríguez, presidente de la asociación de hostelería del centro de Guadalajara (Hoscegu).

Este fin de semana de mediados de diciembre es el de mayor concentración de comidas y cenas de empresa o de amigos en establecimientos de la provincia. - Foto: Javier Pozo

Nadie es ajeno a la escalada de los precios de productos básicos que se mantiene desde principios de año. Por eso, los hosteleros quieren realizar un esfuerzo para fomentar el consumo en estos días de la campaña de Navidad.

«Había dudas porque la gente está muy pendiente de toda esta situación inestable y con todos los precios disparados , pero creo que la conclusión es que la gente ha decidido que van a disfrutar de estas fechas. Después de las fiestas tendremos otro punto de inflexión que ya veremos cómo resulta», mantiene Mario de Lucas que asegura que la crisis económica también está afectando a sus negocios por «los gastos que se generan de cesta de la compra y de energía lo estamos notando muchísimo. Muchos estamos triplicando la factura de la luz y duplicando la de gas. Intentamos equilibrar porque no vale que repercutas todo en el precio de venta porque el cliente es libre de decidir y si considera que el precio de venta está por encima de lo que puede gastar, no va a salir». 

Una reflexión que también comparte Javier Rodríguez desde su experiencia como propietario del bar Metrópolis Café: «Seguimos manteniendo todos los precios tal y como estaban ahora pero no sabemos hasta qué momento vamos a poder seguir así. En la media anual, la cerveza ha subido tres veces en lo que va de año, los refrescos también, el alcohol, la luz casi se ha duplicado. Todos esos gastos, a un bar medio normal, le puede suponer al año casi 8.000 euros más de gastos que el año anterior».

Este fin de semana de mediados de diciembre es el de mayor concentración de comidas y cenas de empresa o de amigos en establecimientos de la provincia. - Foto: Javier Pozo

Previsiones

Con la incertidumbre de lo que pueda pasar con la cuesta de enero, los hosteleros centran sus esfuerzos en recuperar el ambiente festivo de los vermús de Nochebuena y Nochevieja que invitaba a salir desde mediodía para disfrutar de música en directo y de las barras en la calle. 

«El ambiente de los vermús creo que va a ser igual que los últimos años antes de la pandemia. Ya está trabajando todo el mundo en ello. Desde los bares de Hoscegu, la idea es volver a hacer esos vermús al aire libre y sacar las barras si el tiempo acompaña, que haya música, algún concierto, la idea es volver a lo que teníamos antes. El año pasado ya se hizo un intento y salió bastante bien, así que este año que no hay restricciones, creo que tiraremos para adelante. La gente nos lo está demandando», afirma Javier Rodríguez que desconoce «si se incrementará el número de licencias pero, en principio tenemos idea de hacerlo como en los últimos años. Dada la locura que suponen los vermús, hay bares que deciden ya no abrir por la noche porque queda todo arrasado, no queda ni tiempo para enfriar cerveza, pero otros abren para atender la noche que es de un público más joven».