Con la llegada del invierno, la provincia de Guadalajara da la bienvenida a una de sus tradiciones más singulares y emblemáticas: las botargas y enmascarados. Este año lo hace con un incentivo especial, ya que esta manifestación del folclore más ancestral estrena la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC), en la categoría de Inmaterial; un reconocimiento que fue aprobado por el Consejo de Gobierno regional el pasado 27 diciembre. «Aunque parezca mentira, las botargas son Fiesta de Interés Turístico Provincial desde hace casi 40 años, en concreto, desde 1986 que fue declarado por la Diputación. Ahora se suma este nuevo reconocimiento de la Junta que es un paso muy importante para que puedan convertirse en Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco», indica Isabel Nolasco, integrante de la asociación La Tradición Oral y gran conocedora de esta tradición. 

Lo cierto es que las botargas y enmascarados viven un momento extraordinario en la provincia gracias, entre otros motivos, al impulso y la promoción que la Diputación está realizando de esta singular fiesta. Hay que recordar que el pasado 2022, la institución provincial puso en marcha la denominada Ruta de las Botargas, una iniciativa desarrollada en colaboración con la asociación La Tradición Oral que abarca la divulgación de esta tradición a través de recursos como la creación de redes sociales y una página web  (http://turismoenguadalajara.es/reportajes/ruta-de-las-botargas), realización de vídeos, celebración de encuentros, organización de talleres didácticos en los centros escolares, etc. 

Subvenciones

A ello hay que sumar la nueva convocatoria de subvenciones que la Diputación lanzó por primera vez en julio, dirigidas a ayuntamientos y asociaciones, para acciones de recuperación, mantenimiento y potenciación de estas celebraciones. Según rezaba en dicha convocatoria, su finalidad era «posibilitar que la capacidad de atracción turística de las botargas pueda derivar en la formación de un productor turístico de primer orden, que sirva de instrumento dinamizador de la economía de una localidad o comarca determinada, así como evitar la progresiva desaparición de esta importante y peculiar tradición popular». 

Más de 40 pueblos de la provincia de Guadalajara mantienen o han recuperado recientemente la tradición de la botarga. - Foto: Javier Pozo / ArhivoPor otro lado, el diputado provincial de Turismo, Rubén García, anunció que las botargas tendrán un espacio propio en el Centro de Interpretación del Turismo de Guadalajara (Citug), en el Castillo de Torija. Estos seres grotescos ya se muestran en la Posada del Cordón de  Atienza y en el Museo Provincial, de forma que el CITUG será un nuevo lugar donde esta tradición se dará a conocer a los visitantes de la provincia.

Una de las últimas acciones promocionales de las botargas de Guadalajara tuvo lugar el pasado 21 de diciembre, coincidiendo con el solsticio de invierno, mediante la presentación de esta ruta en la Oficina de Turismo de Castilla-La Mancha, ubicada en la Gran Vía de Madrid. Hasta allí se desplazaron una decena de personajes ligados a esta manifestación popular que ya comparten 40 municipios de la provincia y a la que cada año se unen nuevos pueblos. El pasado 2022 lo hizo Cabanillas del Campo con una renovada Botarga de San Blas y, anteriormente, volvieron a corretear por las calles, entre otras, la Vaquilla de Ribarredonda; la Vaquilla Riba de Saelices: el Tio Tararura, el Toro Carnaval y las Mascaritas de Romanones; la Botarga de Yélamos de Abajo;  las Mascaritas y el Tío Alhiguí de Salmerón; la Botarga de Taracena; y La Pantasma y el Alforjero de Fuentes de la Alcarria. En este sentido, Isabel Nolasco considera que este renacer es un síntoma evidente de que la tradición de las botargas «vive un momento de auge y goza de buena salud en nuestra provincia».

Tanto es así que, este año, serán otros dos los pueblos de Guadalajara que sumarán a esta celebración. Se trata de Villaseca de Uceda, donde el pasado sábado 14 de enero tuvo lugar la presentación oficial de su nueva botarga (la anterior dejó de salir en 1932) y Muduex, que hará coincidir la recuperación de esta tradición con sus fiestas en honor de Santa Ana, en el mes de julio. «Las botargas son fiestas tradicionales de invierno, pero hay municipios que han añadido más salidas a sus fiestas de verano para que todo el mundo tenga oportunidad de verlas», puntualiza Isabel Nolasco. «Estamos tremendamente agradecidos a todos los ayuntamientos y a asociaciones culturales de los pueblos que están llevando a cabo el resurgir de esta tradición», añade. 

Más de 40 pueblos de la provincia de Guadalajara mantienen o han recuperado recientemente la tradición de la botarga. - Foto: Javier Pozo / ArhivoLos militares de Romanones son otros de los personajes de antaño, en este caso ligados a la celebración del Carnaval, que renacerán en el presente 2023. Asimismo, la botarga de San Antón de Guadalajara capital, que saldrá el día 17 por la Calle Mayor y en las inmediaciones de la iglesia de Santiago, traerá este año «importantes novedades» que, por el momento, Nolasco prefiere no desvelar. ««Vamos a tratar de que tenga más empaque y más de presencia con nuevos elementos que la realcen», avanza.  

Calendario

En concreto, el rico y prolífero calendario botargil de la provincia arrancó el pasado 24 de diciembre con la primera salida de la botarga de Tórtola de Henares. A ella le siguieron, el día 25, La Patasma y el Alfarjero de Fuentes de la Alcarria, y el Diablo de Setiles el día 28. Con la llegada del Año Nuevo, el mismo 1 de enero, hizo su aparición la botarga de Alarilla –que recibe el nombre popular de zarragón–, la de Humanes de Mohernando y la de los casados de Robledillo de Mohernando. El 6 de enero tuvo lugar una de las celebraciones más importantes y con mayor simbolismo en este ámbito: la Fiesta del Niño Perdido de Valdenuño Fernández, cuya botarga acompaña a los danzantes desde primera hora. En lo que queda de enero también habrá ocasión de conocer otras citas destacadas como la Botarga de Guadalajara (día 17); y las tres apariciones de la Botarga de San Ildefonso de Montarrón (19, 20 y 21 de enero). La Botarga y el Bufón de Mohernando (día 21); la Botarga de Razbona (21); la Botarga de Taracena (22));la entrañabel Botarga Infantil de Robledillo de Mohernando (22) –la única de estas características que se mantiene en la provincia– y la Soldadesca de Mazuecos (24, 25 y 29) son otras fiestas destacadas. La agenda de enero, que continúa muy activa en febrero, se completa con la Botarga de Fuencemillán (día 28) y la de Málaga del Fresno (29).