Emiliano García-Page y Pedro Sánchez no quisieron dar tiempo a especulaciones y zanjaron de un plumazo ayer en Toledo cualquier atisbo de diferencia entre ellos. Fue el presidente de Castilla-La Mancha el primero que afirmó, nada más tomar la palabra en el acto 'El Gobierno de la gente', que se sentía «orgulloso y contento» de tener al presidente del Gobierno de España en la región. «Lo digo muy clarito» enfatizó, ante lo que «algunos dudaban y otros deseaban». Sánchez hizo lo propio en su turno y subrayó su «orgullo de ver a Emiliano hacer las cosas que está haciendo por su tierra», reconociendo incluso que antepone los intereses de su gente aunque eso le lleve a tener «discrepancias» con el Gobierno de la nación.

Con la paz sellada entre ambos, Sánchez centró su intervención en un alegato de las medidas que ha adoptado el Ejecutivo «en defensa de la mayoría social» con la crisis de Ucrania, y contraponiendo el modelo de afrontar las crisis de un gobierno como el del PP que gestiona en beneficio de «una minoría poderosa». «No es lo mismo» reiteró poniendo distintos ejemplos de la gestión en tiempos difíciles. Comparó la «contrarreforma» laboral con la crisis de 2008 que «echó al paro a miles de trabajadores» frente a los ERTE que se activaron con la crisis de la pandemia. Sánchez puso en valor el impuesto que quiere poner -y aseguró que pondrá- a las grandes compañías energéticas sobre sus beneficios extraordinarios para que «arrimen el hombro» en estos momentos de dificultad. «Que no se olviden de que su éxito es gracias al esfuerzo de los españoles» les recordó, y señaló al PP por provocar una «anomalía ibérica», ya que los 'populares' europeos están a favor de este esfuerzo de las empresas. «El PP va a votar en Bruselas a favor de lo que en Madrid vota en contra» dijo, y lo puso como «el ejemplo más elocuente de que la oposición de este país es negacionista», tratando de bloquear cualquier tipo de avance que beneficie a la mayoría social.

En este sentido quiso lanzar un mensaje de tranquilidad al señalar que «estamos mejor preparados para afrontar esta crisis» a pesar de las incertidumbres, por lo que quiso optar «por la esperanza y las soluciones» frente al «miedo y abonarse al lado de los problemas».

Sánchez enarbola su impuesto para defender a la mayoría social - Foto: Javier PozoSánchez terminó afirmando que aunque el PP tenga sus medios de comunicación y el respaldo de las grandes empresas, «nosotros tenemos a la mayoría social de este país, así que ¡a trabajar y a ganar!».