Gracias al convenio firmado por la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha con el colegio provincial de Farmacéuticos de Guadalajara, los 147 dispensarios que hay repartidos por la geografía provincial se van a convertir en un punto de atención para las víctimas de violencia de género.

Todas las farmacias de la provincia contarán con un punto de atención violeta que constará de unos carteles y pegatinas identificativas en el exterior del establecimiento con un código QR que contendrá la misma información que pueden obtener las víctimas y la ciudadanía en el interior, una guía en la que se dan a conocer los recursos disponibles que tiene toda mujer que sea víctima de violencia de género o bien su entorno, que también puede colaborar con la lucha contra esta lacra.

"Estamos detectando que las víctimas tienen miedo o dificultades para expresar su situación, pero en el entorno de la víctima hay gente que conoce esa situación y puede ayudar de una forma indirecta", señala la subdelegada del Gobierno en Guadalajara, Mercedes Gómez.

Precisamente, la cercanía que ofrecen las farmacias y la complicidad que muchas veces se establece con los farmacéuticos, además de su amplio horario de atención en cualquier punto de la provincia, creen que pueden ser factores determinantes para que las víctimas o las personas de su entorno hagan uso de estos puntos violetas. 

"Es una decesión muy acertada porque somos establecimientos sanitarios, los más cercanos, los más accesibles, y que estamos en cualquier pueblo despoblado de la provincia, con lo cual la lucha contra la violencia de género no solo la llevamos al ámbito de las ciudades, también a las mujeres que están en los pueblecitos y tienen menos ayuda y menos forma de salir de esta situación", ha asegurado la presidenta del colegio provincial de Farmacéuticos de Guadalajara, Concepción Sánchez, quien destacaba que estos puntos violeta "van a ser lugares seguros y lugares de protección para ellas. El farmacéutico va a estar informando y dando herramientas para saber cómo tienen que actuar en un momento determinando o llamar a las Fuerzas de Seguridad". 

"Cualquier apoyo, por la cercanía y la colaboración, estamos viendo que es necesario que nos impliquemos", también ha recordado Mercedes Gómez, que ha mostrado su preocupación por el incremento del número de casos de violencia de género respecto al año 2019 después de dos años de cierta reducción a consecuencia de su invisibilización por la pandemia. "Va aumentando. Durante el tiempo de pandemia, bajo un poco, pero sigue aumentando", decía la subdelegada que apuntaba que en este momento, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado mantienen 538 casos abiertos en seguimiento en la provincia de Guadalajara. De ellos, cuatro están catalogados como de riesgo alto, 53 de medio, 237 de bajo y otros 234 sin riesgo apreciado pero con un seguimiento continuo.