Cuando se habla de violencia de género se piensa habitualmente en agresiones físicas o en maltrato psicológico. Desde UGT recuerdan que hay muchas más violencias y por eso la semana que viene van a organizar una exposición itinerante por las cinco provincias para «dar visibilidad a otros tipos de agresiones que se consideran violencia contra las mujeres», apunta Azucena Dombriz, secretaria de Políticas Sociales e Igualdad del sindicato en la región.

Está la violencia sexual, que según una macroencuesta de 2019 la han sufrido dos millones de españolas. La violencia vicaria es aquella que se ejerce contra los hijos. Desde 2013 han sido asesinados 47 menores y en el 82% de los casos a manos de los padres biológicos.

Quizá menos conocida es la violencia estética. Dombriz explica que suele ser provocada por «agresiones machistas, cuando el agresor te dice que no te ve físicamente bien», lo que puede derivar en trastornos alimenticios como anorexia o bulimia. 

Como violencia reproductiva se entiende las actuaciones que atentan «contra la libre elección de las mujeres a ser madres». Dombriz apunta que un 45% de los abortos realizados en el mundo se practican en condiciones poco seguras. La violencia obstétrica se refiere a la que sufre la mujer durante el embarazo, parto o posparto.

En el plano económico también se ejerce la violencia contra la mujer cuando se realiza un «control de los ingresos y recursos financieros de las mujeres». Y en el ámbito del trabajo, la violencia laboral se aplica para «cualquier tipo de discriminación», señala Dombriz, como la diferencia de salarios. 

El secretario general de UGTen la región, Luis Manuel Monforte, apela a analizar «las causas por las que tenemos esa violencia contra las mujeres». Por eso hace un llamamiento para implicar a todas las administraciones, para que se creen juzgados de violencia de género en todas las provincias y denunció la «desvergüenza de la ultraderecha por seguir negando la violencia contra las mujeres». 

La agente de Igualdad de UGT en Castilla-La Mancha, Marta Guerrero, añade que los planes de igualdad  en las empresas son fundamentales para proteger a las víctimas y tener protocolos de acoso sexual. Señala que hay 650 empresas obligadas a tenerlos, pero que hasta la fecha solo se han registrado 242.