Rayo y Getafe empataron el derbi madrileño (0-0) que pudo decantarse del lado del conjunto vallecano, que desaprovechó en la segunda mitad un penalti lanzado por el argentino Oscar Trejo y que acertó a parar con una buena estirada David Soria.
El equipo vallecano llegó a la cita dispuesto a resarcirse tras la dolorosa derrota de la pasada jornada frente al Almería, un rival directo por la permanencia, y el Getafe necesitado por la cercanía con el descenso tras encadenar dos derrotas seguidas contra Valladolid y Real Madrid.
David Soria salva al Getafe
El Rayo, arropado por su afición, que casi llenó el estadio de Vallecas, tomó las riendas del encuentro con la posesión territorial que marcaron Oscar Valentín y Santi Comesaña y tratando de llevar la iniciativa al ritmo que marcó Oscar Trejo, auténtico motor del conjunto de Andoni Iraola.
David Soria salva al GetafeEl Getafe, con su habitual línea de cinco atrás, dejó la iniciativa a su rival hasta encontrar su oportunidad, que llegó a los 25 minutos cuando Damián Suárez puso un centro desde la derecha que el serbio Nemanja Maksimovic remató de cabeza dentro del área que Stole Dimitrievski despejó con la palma de la mano a córner.
Esa fue la ocasión más clara de la primera parte porque el dominio del Rayo no se tradujo en excesivos acercamientos a la portería de David Soria, que vivió muy cómodo la primera mitad, todo lo contrario que en la segunda, en la que salvó a su equipo a los 52 minutos cuando detuvo un penalti a Trejo tras una mano de Fabrizio Angileri dentro del área.
Tras esa acción Quique Sánchez Flores trató de dar otro aire a su equipo con la entrada de Juan Iglesias y Ángel Algobia y pudo marcar con un remate de Borja Mayoral que, en el área pequeña, tapó Alejandro Catena.
El partido se revolucionó con la irrupción de Radamel Falcao, que desde su entrada al césped en el minuto 68 fue un quebradero de cabeza para el Getafe, que volvió a salvarse con una buena parada de David Soria a disparo del colombiano.
El Rayo lo intentó hasta el final, sobre todo a raíz de la entrada de Bebé, que pecó en ocasiones de imprecisiones por la impaciencia, y sometió en los últimos minutos a un asedio del que el Getafe trató de huir saliendo en jugadas rápidas a la contra liderado por Carlos Aleñá aunque apenas inquietó a Dimitrievski.