La reconciliación entre el callejero y la memoria histórica

B. Palancar Ruiz
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El equipo de Gobierno espera poder desvelar los nuevos nombres de cuatro vías de la capital al final de verano, una vez que vecinos vean simplificados algunos de los trámites a llevar a cabo

La reconciliación entre el callejero y la memoria histórica - Foto: Javier Pozo

El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Guadalajara cambiará el nombre de seis calles. Son las últimas que quedaban relacionadas con la dictadura franquista. La decisión se tomó hace meses para cumplir con la Ley de Memoria Histórica aprobada en 2007 por el Gobierno de Rodríguez Zapatero.

Las seis calles que cambiarán su denominación son calle y plaza del Capitán Boixareu Rivera, la travesía y calle de Hermanos Ros Emperador, la vía Fernando Palanca y la calle General Moscardó Guzmán.

Los motivos de este cambio, según explica la segunda Teniente de Alcalde del Consistorio capitalino, son claros: «El compromiso con la memoria democrática de este país es algo que hay que cumplir. Cuando llegamos al Ayuntamiento, teníamos claro que teníamos un compromiso para hacer una ciudad un poco mejor, en la que nadie se pueda sentir agraviado porque haya personas que tengan motivos de honor, como es el nombramiento de una calle, y haya gente que se pueda sentir ofendido por ello», argumenta la concejala Sara Simón.

La reconciliación entre el callejero y la memoria históricaLa reconciliación entre el callejero y la memoria histórica - Foto: Javier PozoEn dos casos, ya se conocen los nombres que sustituirán a los actuales. La calle Capitán Boixareu Rivera, que transcurre entre la glorieta de Bejanque y la plaza de Santo Domingo, tomará la denominación popular por la que se la conoce, La Carrera. Y esto es así, como atestiguan los textos municipales, desde antes de que se convirtiera oficialmente en una calle de la ciudad. Los guadalajareños la llamaban ‘la Carrera de San Francisco’ porque conducía al convento de padres franciscanos. 

Cuando se construyó La Concordia, el Ayuntamiento quiso que la nueva calle recibiera el nombre de Jaúdenes, en honor al gobernador que creó el parque de La Concordia en las Eras Grandes. Desde 1939, estaba dedicada al militar José Boixareu Rivera que nació en Guadalajara en 1910. 

En el caso de la plaza, dedicada a la misma persona, que rodea todo el parque, se ha buscado una nueva referencia histórica con acento femenino. Será la calle de María Pacheco, que corresponde con la figura de María López de Mendoza y Pacheco, mujer de Juan de Padilla, que asumió el mando de la sublevación comunera a la muerte de su esposo.

La reconciliación entre el callejero y la memoria históricaLa reconciliación entre el callejero y la memoria histórica - Foto: Javier Pozo«La Carrera era bastante evidente. Todo el mundo conoce esa calle como La Carrera. Ponerle otro nombre es generar confusión. En cuanto a María Pacheco, es una de las mujeres más ilustres de la revuelta comunera, de ese movimiento que estamos conmemorando. Nos comprometimos a dar ese reconocimiento a los comuneros con una representación, como la que hizo recientemente Gentes de Guadalajara, y con una calle. Pensamos que, ya que teníamos ese compromiso, María Pacheco es la parte invisibilizada de la historia, porque todos sabemos que estaban Padilla, Bravo y Maldonado pero no sabemos que también estaba María Pacheco como una lideresa de la revuelta comunera y nos parecía interesante poner en valor esa figura», explica Sara Simón.

¿Y qué ocurrirá con las otras cuatro calles que cambiarán su placa? Pues a lo largo del verano se conocerán cuáles serán las nuevas denominaciones que se han escogido a través de una consulta popular. 

El Ayuntamiento de Guadalajara propuso 20 nombres de mujer a través de una encuesta publicada en la página web municipal. Para la travesía de Hermanos Ros Emperador se proponía a Gabriela Mistral, Isabel de Valois, Luis Cuesta Gutiérrez, María Fernández Coronel y Enriqueta Hors Bresmes. Para la calle Hermanos Ros Emperador se escogió a María de la Salud Bernaldo de Quirós, Elena Sánchez Arrojo, Aldonza de Mendoza, Isabel de la Cruz y Manuela Contera Mañas; mientras que la propuesta para la calle Fernando Palanca era Benita Hernández Gil, Ana de Mendoza de la Cerda conocida por su título de Princesa de Éboli, Encarnación Cabré Herreros, María Teresa Palacios y Margarita Salas. Por último, Brianda de Mendoza y Luna, Luisa de Medrano, María de Pablos Cerezo, Mencía de Mendoza y María de Cazalla fueron las elegidas para renombrar la calle del General Moscardó Guzmán. 

La reconciliación entre el callejero y la memoria históricaLa reconciliación entre el callejero y la memoria histórica - Foto: Javier PozoEl Ayuntamiento de Guadalajara aún no quiere dar a conocer de manera oficial los resultados de una encuesta cuyos resultados se están cotejando: «En las encuestas, por norma general, no participa mucha gente y tenemos un problema porque, por la Ley de Protección de Datos, si la gente no marca el consentimiento para dar sus datos, la encuesta no sirve para nada. Tenemos una distorsión entre los números y lo que realmente se puede extraer. Me hubiese gustado que hubiese participado más gente. Hay que educar a la gente también en el participar», lamenta la edil.

El Ayuntamiento de Guadalajara ahora trabaja en facilitar lo máximo posible a los vecinos los trámites administrativos que acarrea un cambio de calle y, por otro lado, está estudiando la manera de poner en marcha una línea de ayudas a la que puedan acogerse los comercios a los que este cambio de denominación les ocasione un gasto como, por ejemplo, el recambio de tarjetas de visita o de rótulos. 

Hasta que estos trámites no estén en marcha, según Sara Simón, «a más tardar a final de verano», no se anunciarán cuáles serán los nuevos nombres escogidos para estas cuatro calles de la capital. «Somos conscientes de que pueden ser un trastorno pero creo que hay cosas que, por el compromiso con la Democracia, hay que hacer», mantiene Sara Simón.

Hay que señalar que el último cambio calles con referencia al franquismo se produjo en el anterior mandato de Antonio Román. En marzo de 2017, se aprobó que la plaza de los Caídos en la Guerra Civil pasara a llamarse plaza de España y la calle Gutiérrez Orejón como Buen Vecino en recuerdo a Francisco Buenvecino o Buen Vecino, que a finales del siglo XVI cedió una porción de terreno de su propiedad para poder crear la pequeña callejuela que ahora lleva su nombre y de este modo, comunicar la Carrera de San Francisco con la calle de La Mina. 

El estudio del callejero con perspectiva de género

El Archivo Histórico Provincial acogió en febrero de 2020 la exposición ‘Con nombre de mujer. Las mujeres en el callejero de Guadalajara’ fruto de la investigación de María de la Hoz Bermejo por la que se descubría que solo 61 calles tenían nombre de mujer. En este grupo, se distinguían, por un lado, aquellas dedicadas a vírgenes, santas o religiosas y nobles, y, por otro lado, las que corresponden a nombres destacados para el feminismo de los siglos XIX y XX. Fruto de esa investigación se concluyó que tan solo el 9,4% de las calles de la capital estaban dedicadas a mujeres. 

Con el objetivo de empezar a equilibrar la balanza, en la misma exposición, se proponía al visitante una interesante votación para escoger nombres de mujer representativos para nutrir el callejero. El objetivo era elevar una propuesta al Ayuntamiento con la finalidad de que se tuvieran en cuenta los nombres sugeridos cuando fuese a realizarse algún cambio. 

Es cierto que la capital no es de las peores ciudades en cuanto al número de mujeres que están presentes en su callejero y que hay más ejemplos de desigualdad como en Madrid, donde solo el 21% de las 3.116 calles están dedicadas a mujeres, Barcelona con el 19% de sus 1.303 vías, o Valencia con el 10% de sus 1.474 denominaciones. 

Lo cierto es que esta situación empezó a corregirse por iniciativa del equipo de Gobierno de Jesús Alique en 2004, cuando se nombraron 28 calles en la zona de Las Lomas. Entre ellas, destacan Clara Campoamor, Victoria Kent, Remedios Varó, Carmen de Burgos, María de Maeztu, María Zambrano, Carmen Laforet, Emilia Pardo Bazán, María Moliner, entre otras.

Gracias a este barrio, Guadalajara superó hace diez años al resto de ciudades en lo que respecta a la denominación de calles con nombre de mujer. En 2007, solo el 5% de las calles de las ciudades españolas tenían nombre de féminas cuando aquí el porcentaje era de 9,4%.