Ángel Villarino

RATAS DE DOS PATAS

Ángel Villarino


Italia, de nuevo

15/10/2022

Me aburre aclarar que no tengo ninguna simpatía por Giorgia Meloni ni por su partido cada vez que escribo del tema. Pero no se si hay otro remedio. Porque toca desdramatizar de nuevo el alcance de sus primeros nombramientos.
Volvió ayer la alerta antifascista a las redes, a cuenta de dos políticos que yo no votaría ni con un palo. Meloni ha optado por Ignazio La Russa para presidir el Senado. Se trata de un tipo que, como ella, proviene del Movimiento Social Italiano. Y que, como ella, hizo el tránsito hacia la derecha democrática   hace ya bastantes años.
Conocí a La Russa hace muchos años en un acto en el que compartía cartel con políticos del PP. Era entonces presidente de Alianza Nacional. También fue presidente del Congreso y del Senado, además de ministro de Defensa con Berlusconi. No solo no representa a la 'nueva derecha', es que es una de las caras más reconocibles del mundo político italiano desde hace ya muchas décadas.
El nuevo presidente del Congreso, lorenzo fontana, no lleva tantos años en el juego. Pero lleva los suficientes. Es uno de los primeras espadas de la Liga de Matteo Salvini, que lo hizo ministro en dos ocasiones durante el gobierno de Giuseppe Conte, líder del Movimiento 5 Estrellas, un partido que ahora todos consideran inocuo pero cuya llegada al poder puso más nervioso al sistema italiano que la victoria de Meloni.
La Russa y Fontana (más Fontana que La Russa) son dos exponentes de la derecha más autoritaria y nacionalista. No es difícil encontrar en la hemeroteca sus expresiones de odio contra homosexuales o extranjeros. Pero no suponen  nada nuevo en la escena política italiana, donde mucho antes de las alertas y los desgarros había ya ministros que paseaban cerdos sobre los terrenos destinados a construir mezquitas. Francamente, y ojalá no me equivoque, no creo que vayamos a ver nada que no hayamos visto antes. Lo que no quiere decir que me guste o que lo comparta. Qué pesadez tener que repetirlo.