«Queremos que Horche sea un pueblo donde vivir en paz»

Inmaculada López Martínez
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El presidente de la Asociación Vecinal Defiende Horche analiza la situación que vive el municipio a raíz de la ocupación masiva de viviendas y anima a asistir a la concentración nacional que se celebra este sábado frente al Congreso de los Diputados

«Queremos que Horche sea un pueblo donde vivir en paz» - Foto: Javier Pozo

El preocupante problema de ocupación que sufre el municipio de Horche propició la creación de la Asociación Defiende Horche el pasado mayo. Fernando García es el presidente de este colectivo vecinal que estará presente el sábado, a las 12 horas, en la concentración nacional que tendrá lugar frente al Congreso de los Diputados para pedir una ley antiokupas.

¿Cuándo comienzan a ser conscientes de que existe un problema con la ocupación en su pueblo?

La sensación es casi desde el principio, desde que empezaron a ocuparse viviendas en el pueblo, es decir, desde hace unos ocho años. Todo comenzó a raíz de unos alquileres sociales que La Caixa estableció en unas viviendas que adquirió durante la crisis inmobiliaria tras quebrar la empresa propietaria, se conocen como Las Tres Mil. Esta entidad, sin contar con ninguna administración y sin realizar ningún tipo de filtro, sacó estos alquileres sociales y metió a vivir gente que enseguida nos dimos cuenta de que era «conflictiva» en su mayoría y que no estaba acostumbrada a vivir en comunidad. Con el paso del tiempo, la situación fue empeorando, el movimiento de gente en estas casas ha ido a más y los lanzamientos que se han producido no se han protegido.  

«Queremos que Horche sea un pueblo donde vivir en paz»«Queremos que Horche sea un pueblo donde vivir en paz» - Foto: Javier Pozo¿Cuántos okupas calculan que hay en el municipio y cuál es su perfil?

El bloque más grande, Las Tres Mil, consta de unas 90 viviendas y luego hay otro bloque en la calle Cristóbal Pérez Pastor con 11 viviendas. En total, calculamos que habrá ocupadas unas 60 viviendas en las que viven en torno a 200 personas. El perfil es variado. Hay migrantes, españoles, personas de etnia gitana, familias, etc. Seguramente hay gente buena que lo necesita, pero ya es muy difícil diferenciar.

¿Se mantienen los alquileres sociales o las personas que viven en esas casas son todos okupas?

Sabemos que hay algún alquiler social todavía, pero la mayoría están de okupas porque no lo pagan. También queda algún propietario del pueblo que está aguantando como puede y otros que no han tenido más remedio que irse porque la convivencia era imposible y que, por tanto, están pagando su casa sin poder disfrutarla. Pero la mayoría son okupas y tienen enganchada la luz y los servicios de manera ilegal. 

¿Cuándo y por qué surge  la Asociación Vecinal Defiende Horche? 

A raíz de la pandemia, la situación empeoró. Se produjo un efecto llamada. Cada vez venía más gente a ocupar estas viviendas e incluso hubo intentos de ocupación de casas particulares de gente del pueblo y segundas residencias que tuvieron que estar meses cerradas por la pandemia. Además, empezaron los robos de móviles a chavales del pueblo, las peleas, las amenazas, los robos en comercios, en bares, etc. Es decir, el problema de la ocupación se fue transformando en un problema de convivencia e inseguridad ciudadana. Y ahí fue cuando nos unimos y decidimos crear la asociación, en concreto, el pasado mayo. Nuestro principal objetivo es que Horche sea lo que siempre ha sido: un pueblo donde vivir en paz y donde poder salir a la calle con tranquilidad.

 ¿Hay miedo en Horche?

Sí, especialmente tienen miedo los padres que tienen hijos adolescentes que ya salen solos a la calle y también por parte de la gente mayor. Desde hace tiempo, la gente de Horche vive en tensión, en alerta.

¿Cuántos socios integran Defiende Horche? 

Somos casi 700 socios.

¿Qué tipo de delincuencia ha aumentado en el municipio?

Aparte de los robos y amenazas que he comentado,  ha crecido mucho la presencia de vehículos que entran y salen del pueblo y que circulan a altas velocidades sin seguro ni documentación alguna. Además, hay problemas de ruidos y suciedad en la zona de las viviendas ocupadas.

¿Tienen constancia de que exista menudeo o tráfico de drogas?

Constancia al cien por cien no tenemos porque nosotros no lo hemos visto, pero se comenta que sí. De hecho, la Guardia Civil ha descubierto plantaciones de marihuana, se ven coches no conocidos que van y vienen, trasiego de gente que entra y sale... Todo apunta a que sí, que se da también este tipo de delito.

¿Creen que detrás de esta situación hay una mafia organizada?

Sí, lo sabemos y sabemos quiénes son. Vinieron de Guadalajara, estaban en las viviendas de San Vicente de Paúl. Allí amedrentaban a los vecinos, conseguían que se fueran y luego alquilaban los pisos a gente que buscaban y en vez de pagar 50 euros que era el alquiler social de San Vicente Paúl. pues les cobraban 300 euros o lo que fuese. Les consiguieron echar de allí y se vinieron a Horche donde actuaron igual.

¿En quién recae la responsabilidad de haber llegado a esta situación?

Nosotros creemos que los culpables no son los okupas sino quien permite que esto ocurra. De hecho, nuestra asociación surge, primero, para pedir a La Caixa, que es la propietaria de estos pisos, que actúe, que los inhabilite y que se ocupe de ellos; y, segundo, para pedir un cambio de ley porque la actual ampara al okupa y al delincuente. 

¿Se sienten respaldados por las autoridades?

Depende a quién preguntes. Hay gente que piensa que el equipo de Gobierno de Horche ha hecho mucho y otros que no. Lo que hemos notado de un tiempo a esta parte es más presencia de Guardia Civil en el municipio. Están haciendo todo lo posible con los medios que tienen. La gente quiere que se haga más, pero somos conscientes de que la ley está como está y es muy garantista.

En los últimos meses, esta problemática ha sido noticia a nivel nacional. ¿Creen que está mermando la imagen del pueblo?

Buena publicidad no es, desde luego. Tú pones «Horche» en Google y casi todo lo que te aparece son noticias relacionadas con el problema de ocupación que sufrimos. Sabemos que hay propietarios de casas rurales que han perdido reservas por todo este revuelo. Sin embargo, por otro lado, creo que estamos dando una imagen de unidad, de fuerza, de solidez y de querer cambiar las cosas muy positiva. La gente de Horche tienen que estar orgullosa de cómo nos hemos posicionado. Si tienes un problema y miras para otro lado, no se va a solucionar y vives con miedo. Pensamos, porque así nos lo han dicho desde la Plataforma a nivel nacional, que somos el único municipio de España que se ha unido por enterno ante el problema de la ocupación. Hemos creado un movimiento de solidaridad, de apoyo, de estar pendientes los unos de los otros que es único porque abarca a todo el pueblo. 

¿Sabe si hay muchos municipios que sufran un problema parecido?

Sí, cada vez más. En el caso de la provincia de Guadalajara, se da la circunstancia de que la ocupación está bajando en la capital y se está trasladando a pueblos como Yunquera, Alovera, Taracena, Iriépal, Pioz, etc. Al final, la ocupación es un efecto llamada. En Horche, los okupas se han hecho fuertes, han creado un gueto y si no se ponen medios para pararlo, esto va a terminar mal.

Defiende Horche es un de los colectivos que este sábado secundará la manifestación convocada por la Plataforma Nacional de Afectados por la Ocupación. ¿Qué piden?

Pedimos que se cambie la ley actual porque la ocupación está generando muchísimos problemas a quien  le coge de por medio. Me refiero problemas a nivel personal, a nivel económico, en el ámbito de la seguridad e incluso a nivel psicológico. Queremos una ley justa que defienda la propiedad privada. En definitiva, un cambio legislativo que asegure la protección de las víctimas de este delito en todas sus variantes.

¿Tienen esperanza de que este problema se solucione?

Si la ley no cambia, va a ser muy difícil. Está claro que con el Gobierno actual no va a ser posible porque lo han dicho, a pesar de que hay mucha gente que ha votado al PSOE y que no comulga con esto.

¿Harán algún otro tipo de acción?

No vamos a parar hasta conseguir nuestro objetivo. Defiende Horche nació para llegar al final del camino. No sólo es lo que se ve, la asociación trabaja mucho a nivel interno. Tenemos reuniones con autoridades, con administraciones, estamos en permanente contacto con la Subdelegación y con la Guardia Civil para dar aviso de lo que ocurre... Y ello ha permitido dar importantes pasos. Por ejemplo, pedimos al Ayuntamiento la colocación de cámaras de videovigilancia y la elaboración de una ordenanza de convivencia y ambas cosas ya están en estudio.

¿Algún mensaje final?

Me gustaría recordar que sin seguridad, no hay prosperidad y sin prosperidad, ningún país funciona. También quiero dar las gracias a la gente que nos apoya y que nos escucha y al grupo de trabajo de Defiende Horche. Invitamos a todo el mundo a acudir a la manifestación de este sábado, la primera a nivel nacional porque, al final, éste es un problema que nos afecta a todos. Hoy a ti, mañana a mí, nunca se sabe cuándo te va a tocar la china. Por último, quiero animar a los vecinos de Horche, que no decaiga el ánimo porque el éxito de la asociación es la unión. Esto es una carrera de fondo, pero si el pueblo de Horche permanece unido, conseguiremos nuestro objetivo.