El Real Madrid celebró ayer la conquista de su Liga número 36 tras vencer en la final al Barcelona con una visita a la sede de la Comunidad de Madrid y al Ayuntamiento de Madrid en que destacaron las dedicatorias a la figura de su entrenador, Pablo Laso, que no pudo dirigir al equipo en los últimos encuentros al sufrir un infarto del que se recupera de forma satisfactoria.
En la primera de las dos recepciones, Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la Comunidad de Madrid, le hizo entrega a Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, de una placa conmemorativa como vencedores y destacó «la fortaleza y capacidad de superación» del cuadro merengue y dijo que su «ADN es resurgir para ganar».
«En algunas ocasiones nos dicen si nos posicionamos por unos equipos u otros. Soy la presidenta de todos, pero los del Real Madrid no nos traen más que alegrías. Gracias por llevar el nombre de nuestra región tan alto y gracias porque no es una Liga 36 sin más. A Pablo Laso le doy el cariño de la afición y a Chus Mateo le agradezco su extraordinario papel los últimos partidos, expuso Ayuso en su discurso.
Posteriormente, el equipo se dirigió al Ayuntamiento donde fueron recibidos por el alcalde José Luis Martínez-Almeida, que calificó a los jugadores como «auténticos héroes en esta temporada». «Os transmitimos el sentimiento de orgullo de toda la ciudad por este logro deportivo», afirmó el intendente.
«Lo que ha sucedido a lo largo de todos estos meses no es solo una extraordinaria gesta deportiva sino que desde el punto de vista humano ha sido un comportamiento absolutamente ejemplar. Os han pasado tantas calamidades y no es que deportivamente hayáis respondido es que humanamente sois un ejemplo para la ciudad», declaró Martínez-Almeida.
Por ello, cree que «cuando la gente se pregunta qué es el Real Madrid tiene que mirar al equipo de baloncesto en esta temporada». «Los valores hacen que esta gesta vaya más allá de lo meramente deportivo», remarcó el alcalde.
El presidente del Real Madrid recalcó que esta Liga Endesa es «un nuevo título y una victoria con una emoción especial». «Todos sabemos que no es un título más y simboliza lo que es realmente este grupo de jugadores, que ha luchado contra muchas adversidades, que han tenido perseverancia y un hambre de triunfo y coraje imparables», expresó el directivo.
Por su parte, el capitán, Sergio Llull, dio «la enhorabuena a los jugadores y al cuerpo técnico» tras un nuevo éxito después de «un año muy duro y con muchos contratiempos». «Nos ha pasado de todo, hasta al entrenador le ha dado un infarto», señaló el jugador para cerrar los festejos de una de las temporadas más especiales.