La Universidad Laboral de Toledo celebra su 50 aniversario. La antigua Universidad Laboral de Toledo -en la actualidad IES- tiene dos murales únicos y excepcionales. Forman parte del patrimonio de la ciudad. Los dos de grandes dimensiones. Uno pintado sobre la pared a la encáustica, una técnica tan antigua como feroz. Y el otro confeccionado en cerámica esmaltada. El mural pintado es del autor murciano José Hernández Carpe. El de cerámica, de Suzanne Grange y Raymond Edanz, matrimonio francés, afincados en Toledo por no se sabe  qué misterioso capricho.
El mural de Carpe, situado en la pared del modulo administrativo, describe de forma alegórica a la ciudad y al nuevo centro, construido para la formación profesional de los hijos de los trabajadores mutualistas de la provincia. Se asemeja a una representación entre cubista y naif de la ciudad, aunque sea algo más,  desde el lugar donde se sitúa el complejo formativo. El otro, titulado 'el Mural del Anillo', se compone de texturas y  confección diferente. Son tres paredes que suman ciento treinta metros de cerámica brillante en los que se desarrolla una historia de trasfondo metempsiquico con personajes y paisajes de un mundo no terrenal. Al Tajo y al Greco se deben la causa de tanta belleza. Si no sonara a exagerado diría que llegaron a Toledo, construyeron el mural, y cuando intuyeron que su sueño se  había cumplido, volvieron a  Francia.
De ambos creadores existen descendientes. De Carpe, su hija Celina, empeñada en difundir la obra del artista murciano, mediante una Fundación, destinada reunir, catalogar  y valorar la obra. Ella conserva los recuerdos frenéticos y dulces de su padre. Busca completar el circulo de toda su obra, abundante y dispersa. En Murcia, en el año 2022, se realizó un exposición y un catalogo que pretende fijar el proceso creativo de este muralista singular. Para nuestra suerte vive muy cerca de Toledo. En Chinchón, casi a dos pasos de aquí, reside Mathilde, hija de Suzanne y Raymond. Quién  aún nos puede revelar voces y formas de la creación del mural tan ingente como casi inabarcable. Cuenta una historia sin precedentes en Toledo, realizada casi en directo en el centro educativo.  La Universidad Laboral, en este cincuentenario, no debiera olvidarse de ambas herederas que son memoria viva de unas obras únicas.